Un BCE de vacaciones avisa de que la recuperación será “desigual y parcial”

Un BCE de vacaciones avisa de que la recuperación será “desigual y parcial”


Christine Lagarde, presidenta del BCE, reconoció este jueves en rueda de prensa que la zona euro se enfrenta a una recuperación económica “significativa, pero desigual y parcial”. Además, aseguró que se está produciendo un fuerte incremento de la holgura en la economía, es decir, que una parte notable de los factores de producción (trabajo, capital y tierra) están ociosos, lo que aleja al PIB de su potencial y a la inflación de su objetivo. Por ello, aunque la recuperación económica ya ha empezado, aún se necesita una política monetaria muy expansiva que apoye y solidifique el crecimiento económico, para que las cicatrices en la economía sean lo más pequeñas posibles.

Sin ninguna novedad importante ni en el comunicado ni en la rueda de prensa posterior, el BCE parece haber empezado también el periodo de vacaciones y su reunión apenas tuvo incidencia en los mercados. La deuda generó ligeras ganancias, el euro se mantuvo estable en su cruce con el dólar y las bolsas mantuvieron pequeñas pérdidas.

“La información recibida desde nuestra última reunión de política monetaria a principios de junio muestra una reanudación de la actividad económica de la zona del euro, aunque el nivel de actividad sigue muy por debajo de los niveles que prevalecían antes de la pandemia de coronavirus (Covid-19) y las perspectivas siguen siendo muy inciertas”, declaró la francesa.

“Tanto los indicadores de alta frecuencia como los de encuestas tocaron fondo en abril y mostraron una recuperación significativa, aunque desigual y parcial, en mayo y junio, junto con la contención continua del virus y la relajación asociada de las medidas de contención”, señaló Lagarde. Desigual porque unos países están superando la crisis mucho mejor y más rápido que otros, pero también porque unos sectores están recuperando los niveles de actividad mucho más rápido que otros. “La recuperación se encuentra en sus primeras etapas y sigue siendo desigual en todos los sectores y jurisdicciones. Después de disminuir un 3,6% (el PIB), trimestre a trimestre, en el primer periodo de 2020, se espera que el PIB real de la zona del euro se contraiga aún más en el segundo trimestre”, sostiene la presidenta del BCE.

Es cierto que han surgido signos de una recuperación en el consumo, mientras que también ha habido un repunte significativo en la producción industrial. Pero “al mismo tiempo, las condiciones moderadas del mercado laboral y el ahorro de precaución de los hogares están afectando al gasto del consumidor. Las débiles perspectivas comerciales y la alta incertidumbre están frenando la inversión, mientras que la debilidad de la economía mundial está obstaculizando la demanda externa de bienes y servicios de la zona del euro”, reconoció la abogada francesa durante su discurso.

La debilidad del mercado laboral y la caída de los ingresos reales, junto a la incertidumbre excepcionalmente elevada sobre la evolu

La flexibilidad del PEPP Además, la presidenta del BCE quiso destacar la flexibilidad del programa de compras contra la pandemia. Este programa, aunque tiene un tamaño de 1,35 billones, puede usarse de forma flexible: las compras pueden variar cada semana o mes, no tienen que seguir un ritmo mensual como el resto de programas de compras. Por otro lado, se puede usar para evitar la fragmentación financiera en la zona euro, por lo que si hay tensión en la deuda italiana, el BCE puede comprar más bonos italianos de forma temporal para que la política monetaria se transmita de la misma forma en todas las jurisdicciones. “En nombre de la flexibilidad, para que el programa sea eficiente y proporcionado, tenemos que desviarnos como ha pasado con Italia, Portugal, un poco con Alemania, mientras que nos hemos quedado por debajo en Francia, pero la flexibilidad es la clave principal que diferencia al PEPP de otros programas de compras, aunque la convergencia tendrá lugar en algún momento, ahora estamos aprovechando la flexibilidad”, destacó.

En cuanto al fondo de recuperación que negocian los países para la zona euro, Lagarde ha señalado con resignación que “las cosas en Bruselas llevan tiempo y mucho esfuerzo, los líderes políticos deberían enviar una señal clara al mundo, al mercado, no se puede perder el tiempo”. La aprobación de este fondo está encontrando la oposición frontal de países como Holanda, una de las economías más importante de la Unión Europea.

Este fondo contará con una parte importante de subvenciones a fondo perdido que irán a parar a los países que más lo necesiten. Por otro lado, también se concederán créditos blandos que deberán ser devueltos. Lagarde ha insistido en que el paquete final “debe aprobarse rápido y ser ambicioso”, el tiempo es clave para que la recuperación no sea desigual y genere mayores divergencias en la UE.

“La UE no debe perder el tiempo, el acuerdo debe ser rápido y ambicioso” señala Lagarde

Fuente: El Economista España