Tetaz: Empieza a ceder la incertidumbre

Tetaz: Empieza a ceder la incertidumbre
«No será posible sostener un acuerdo social con convergencia a una nominalidad del 35%, cumpliendo las promesas de campaña de aumento a jubilados, científicos y base de la pirámide social con el plan Hambre cero, manteniendo al mismo tiempo la indexación de la formula de movilidad. »

Hay un chiste muy bueno que ilustra a la perfección como incluso la confirmación de una mala noticia puede ser buena, si ayuda a reducir la incertidumbre.

Por Martín Tetaz

Resulta que un señor se quejaba que su vecina del piso de arriba llegaba tarde de trabajar, se sentaba en la cama y revoleaba los zapatos: ¡pum!, caía el primero, ¡pum!, caía el segundo y el tipo se despertaba todas las noches. Cierto día se cruza con la señorita en el ascensor, le relata su martirio y le pide que, por favor, la próxima vez sea mas considerada y se saque los zapatos sin hacer ruido. La chica se disculpa y se pasa todo el día pensando que esa noche, al llegar a su casa, debe ser mas cuidadosa, pero en el fragor del día se olvida. Llega tarde, como de costumbre, se lava los dientes y enfila para el dormitorio; se sienta en el borde de la cama, revolea el zapato derecho y cuando este se estrella contra el piso, se acuerda de su vecino, se saca el segundo calzado con delicadeza y se entrega al sueño. Por la mañana se vuelve a cruzar al del piso de abajo en el ascensor, le pide disculpas y le pregunta si se despertó por el zapatazo. El tipo la mira desencajado y le dice, “no, el primer zapatazo apenas me molestó, pero me pase el resto de la noche sin poder dormir, esperando que cayera el segundo”.

Desde el viernes la economía tiene una incertidumbre menos; Martín Guzmán será el Ministro de Economía de la nueva gestión y ahora sabemos un poco mas sobre lo que vendrá. La tesis de Martín en Brown es sobre las causas y consecuencias de las crisis financieras, con eje en el problema que los agentes económicos tienen para identificar los cambios permanentes en la tendencia de crecimiento de los ingresos. Si mi facturación crece 10% por año y pienso que lo seguirá haciendo a futuro, es razonable que quiera endeudarme para adelantar esos flujos y suavizar mi patrón de consumo a lo largo de mi ciclo vital. Muchas veces esa tendencia es fácil de identificar; por ejemplo, un jugador de futbol tiene claro que, la secuencia de crecimiento de sus ingresos hará pico cuando llegue a Europa y promedie su carrera, pero también sabe que una vez que alcanzó la Premier League o el fútbol español, las chances de que los ingresos sigan creciendo, se reducen y que cuando se vaya acercando a su edad de retiro, empezarán a declinar. En el otro extremo, un bróker inmobiliario que cobra una comisión por la compraventa de propiedades en medio de una burbuja de activos, puede tener dificultades para interpretar que su bienestar es transitorio y puede creer que las propiedades seguirán subiendo para siempre, hasta que el mercado eventualmente deje de trepar y ya no pueda pagar sus deudas.

Volvamos a las economías latinoamericanas. Aquí no solo las personas, sino los gobiernos han tenido enormes dificultades para entender que los superciclos de commodities, son justamente cíclicos, inflando sus niveles de gasto público y privado a niveles que no son sostenibles cuando la bonanza de los términos de intercambio pega la vuelta. La crisis que estamos viendo en Bolivia, Ecuador, Venezuela, Chile, Argentina y ahora Colombia, tiene un denominador común en las dificultades institucionales para identificar la transitoriedad de las mejoras de bienestar asociadas al boom de commodities. Arriba de eso, los mercados financieros sobreestiman los efectos de las reformas que los cambios hacia gobiernos market friendly, pueden causar, incrementando su exposición hasta que resulta evidente que los cambios de productividad no serán tan espectaculares.

Guzmán está convencido que la liberalización financiera pavimenta el camino para que estos sesgos de sobre confianza y esta confusión de shocks transitorios por definitivos, corran mas rápido, aumentando la volatilidad de los ciclos y conduciendo a las crisis de deuda. Por lo tanto, vienen épocas de fuerte regulación de los flujos de capitales, probablemente con mas foco en el ingreso, que en la salida; mas concentrado en el parking de fondos externos, que en el cepo.

Argentina tiene vencimientos de capital con privados por 8 puntos del PBI en 2020 y a eso se le suman 3,3 puntos de intereses. Para una economía con un déficit primario de 0,5% del PBI, debería bastar una tasa promedio de crecimiento del 3,8% anual para estabilizar el ratio deuda/PBI, pero si los mercados creen que habrá problemas de liquidez, es lógico que se adelanten al efecto de una crisis que, aunque causada por esa dificultad temporaria, deteriore la capacidad de cumplir con los compromisos en el largo plazo. “Las percepciones de solvencia afectan al precio de la liquidez, y el precio de la liquidez afecta a la solvencia”, escribió el flamante ministro. Esto explica por qué Guzman cree que la salida de la crisis requiere una reestructuración agresiva y eso da cuenta de por qué lo designó el Presidente electo. El reperfilamiento, para ser exitoso, no solo en terminos de alcanzar los porcentajes de aceptaciones que habiliten las cláusulas de acción colectiva, sino para despejar las dudas sobre la capacidad de honrar los pagos que surjan, debe contemplar al mismo tiempo una carga de intereses pagable y una secuencia de vencimientos sin picos que generen estrés de liquidez.

Las tensiones en el equipo económico estarán en el frente fiscal, porque Martín Guzman ha dicho que hay que converger a un superavit fiscal y externo que sea compatible con los pagos comprometidos, a una velocidad que no desequilibre la macro. Esta afirmación pone en discusión la velocidad del ajuste implícita en la propuesta de Lacunza de superavit primario del 1% para 2020, plasmada en el proyecto de Ley de Presupuesto, pero descarta tambien la idea heterodoxa de empujar la economía incrementando sistemáticamente el deficit público. Traducido al castellano: no será posible sostener un acuerdo social con convergencia a una nominalidad del 35%, cumpliendo las promesas de campaña de aumento a jubilados, científicos y base de la pirámide social con el plan Hambre cero, manteniendo al mismo tiempo la indexación de la formula de movilidad.