Tarjeta alimentar y potenciar trabajo

Tarjeta alimentar y potenciar trabajo

La inversión en la Tarjeta Alimentar se incrementó un 123% en la comparación interanual, mientras que el presupuesto erogado en el Potenciar Trabajo aumentó en un 170%. Así se desprende de un análisis realizado por el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO) sobre la ejecución presupuestaria

En un contexto inflacionario más que adverso, con una proyección anual que llegaría al 60%, las políticas de ingresos se convirtieron en un eje central para morigerar la situación social de millones de argentinos y argentinas. Durante el primer cuatrimestre del año, la inversión en la Tarjeta Alimentar se incrementó un 123% en la comparación interanual, mientras que el presupuesto erogado en el Potenciar Trabajo aumentó en un 170%. Así se desprende de un análisis realizado por el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO) sobre la ejecución presupuestaria. En cuatro meses, el gasto total aumentó un 75% pero se viene desacelerando.

Los servicios sociales representaron un 66% del gasto devengado durante este 2022. El programa Tarjeta Alimentar llega a más de 3 millones de personas, principalmente mujeres (94%) y tuvo un incremento en su monto del 50%, anunciado el mes pasado en el marco de una profundización de la política de ingresos. En marzo, el Estado había erogado 19.891 millones de pesos mientras que en abril fueron 28.739 millones. Entre enero y el cuarto mes del año, el gasto total de esta iniciativa tuvo un incremento del 123%.

Crecimiento del gasto total

Con la primera revisión del FMI sobre la cabeza del Ministerio de Economía, el staff del organismo multilateral observará que el gasto total creció en cuatro meses un 75% pero con una marcada desaceleración desde enero. En el primer mes del año había registrado una suba de 88%, seguido por un 79% en febrero y del 76% en marzo.

Existen dos ítems claves en el acuerdo con el Fondo: el energético y las transferencias hacia las provincias, rubro que el Gobierno se comprometió a reducir. Las transferencias económicas para el sector eléctrico y gasífero registraron un incremento de 166%. Del total de recursos, el 63% fue para CAMMESA, seguido por IEASA (21%), Plan Gas (7,4%), subsidio gas licuado (3,1%), entre otros. En total, los subsidios energéticos representaron solo un 10,2% del gasto total en los primeros cuatro meses de 2022.

En relación a las transferencias hacia las provincias, el Estado distribuyó $7418 millones en Aportes del Tesoro Nacional (ATN), de los cuales la provincia de Buenos Aires recibió el 36%, seguido por Corrientes (9,4%), Tucumán (9%), La Rioja (7,5%), Catamarca (7,1%), Formosa (6,2%), Santa Cruz (4,8%), Chaco (4%), Chubut (2,7%) y Misiones (2,7%).

Otro de los temas pendientes del Poder Ejecutivo ante el FMI será recalibrar las partidas presupuestarias en base a las nuevas proyecciones de inflación anual, tal como había adelantado la semana pasada el director para el Hemisferio Occidental, Ilan Goldfjan.

Fuente: BAE