Senado, FdT pretende aprobar esta semana los superpoderes de Cafiero

Senado, FdT pretende aprobar esta semana los superpoderes de Cafiero

El oficialismo buscará blindar de manera definitiva esta semana los superpoderes presupuestarios para el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero. El Senado tiene previsto aprobar el próximo jueves el polémico decreto de necesidad y urgencia 457/20, que le otorga amplias facultades al funcionario para reasignar y modificar partidas con el argumento de la emergencia sanitaria producto de la pandemia de coronavirus.

El decreto cuenta con dictamen favorable de la Comisión de Trámite Legislativo, avalado sólo por la mayoría oficialista del Frente de Todos, y es, por el momento, el único tema con tratamiento asegurado en la sesión que la Cámara alta tiene previsto realizar este jueves, la cual aún no fue convocada por la vicepresidenta Cristina Kirchner.

La aprobación por parte de una cámara, en este caso sería el Senado, pondría al DNU a salvo de cualquier posibilidad de que pueda ser revertido. Es que, de acuerdo a la ley de trámite legislativo, sancionada durante el gobierno de Néstor Kirchner, se necesita el rechazo de ambas alas del Congreso para derogar un decreto de necesidad y urgencia.

De hecho, la oposición, encabezada por Juntos por el Cambio, intentó hacerlo la semana pasada en la Cámara de Diputados. Si bien fracasó en su intento por reunir el quórum para habilitar la sesión, le hizo ver al oficialista Frente de Todos el abismo desde bastante cerca: le faltaron apenas cuatro legisladores para abrir el debate.

Tal vez para evitar sustos como el del jueves último es que Cristina Kirchner dio la orden de incluir la ratificación del DNU 457/20 en el temario de la próxima sesión del Senado, donde el Frente de Todos tiene una holgada mayoría que le permitirá cerrarle el paso a cualquier intento por asestarle al Gobierno lo que sería un duro golpe político.

La aprobación del polémico decreto también servirá como mensaje político de cara a la próxima visita de Cafiero al Senado. Prevista para el 17 del corriente, a las 14, el jefe de Gabinete brindará su primer informe sobre la marcha del Gobierno ante una de las cámaras del Congreso desde que asumió el cargo, en diciembre del año pasado.

El ministro coordinador está obligado a brindar un informe todos los meses de manera alternada ante cada una de las cámaras legislativas, tal como lo establece el artículo 101 de la Constitución Nacional. El estallido de la pandemia apenas 20 días después de iniciado el período ordinario de sesiones legislativas, el 1 de marzo último, y las demoras del Congreso en encontrar una solución adecuada a la necesidad de sesionar respetando el distanciamiento social obligatorio dilataron el debut de Cafiero como jefe de Gabinete ante el Congreso.

De esta manera, el joven funcionario podría realizar su primer informe con la seguridad de que sus facultades para disponer del presupuesto nacional estarán a salvo de cualquier ofensiva opositora.

A ese espaldarazo se podría sumar el de un arreglo del Gobierno con los acreedores por la deuda en default. Esa fue la apuesta del oficialismo al fijar con tanta antelación, dentro de tres semanas, la visita de Cafiero. Ese escenario soñado se completaría con la vicepresidenta Cristina Kirchner en el proscenio de la presidencia del Senado como primera gran espectadora del informe.

En agenda

Por el momento, el DNU 457/20 es el único tema asegurado para una sesión esta semana en el Senado, aunque el oficialismo pretende avanzar con la firma del dictamen a algunos proyectos que ya cuentan con la aprobación de la Cámara de Diputados, y así poder convertirlos en ley el jueves.

Se trata de la reglamentación de la receta electrónica y la educación a distancia, normas que avalan medidas adoptadas durante la crisis sanitaria por el Covid-19. También podría avanzarse con los cambios en la ley de alquileres.

Pero la tensión política de la semana pasada, con el Frente de Todos queriendo crear comisiones investigadoras del gobierno de Mauricio Macri, ha puesto a la oposición en estado de alerta y podría negarse a facilitar el tratamiento sobre tablas de esas iniciativas.

Fuente: La Nación