Pacto de precios y salarios a partir de febrero. Dudas en el sector empresarial

Pacto de precios y salarios a partir de febrero. Dudas en el sector empresarial

Buscan que ambas variables converjan en el 29% de inflación proyectada por el Gobierno para 2021. El plan se tratará hoy en una reunión del gabinete económico que encabezará Guzmán

Allá por noviembre de 2019, un mes antes de que asumiera Alberto Fernández, desde el actual oficialismo adelantaban que el Gobierno entrante buscaría un pacto de precios y salarios entre los empresarios y los sindicatos. La gestión se puso en marcha y el tiempo fue pasando. De tanto en tanto, reaparecía la versión de que un acuerdo de este tipo era inminente.

Ahora que la administración se acerca a cumplir un año y dos meses, la Casa Rosada finalmente se propone avanzar con su plan. Hoy, en el Ministerio de Economía, habrá una reunión del gabinete económico en la que se discutirán las ideas centrales del plan, según informaron anoche a Clarín fuentes oficiales.

El objetivo principal es que durante el año haya una convergencia de precios y salarios hacia la meta de inflación del 29% que proyectó el Poder Ejecutivo para 2021 en la ley de Presupuesto. Analistas privados, sin embargo, prevén que el alza de precios será mayor: estiman una inflación con un piso de 45%.

Pronta reunión

De la reunión en la que se empezará a discutir el pacto participarán los ministros de Economía Martín Guzmán, de Desarrollo Productivo Matías Kulfas, de Trabajo Claudio Moroni, la vicejefa de Gabinete Cecilia Todesca y las titulares de la ANSeS y la AFIP, Fernanda Raverta y Mercedes Marcó del Pont. No fueron invitados al encuentro ni jefes de la CGT ni referentes del sector empresario.

“Será solo una reunión técnica. Será solo el inicio del plan de trabajo”, dijeron anoche en la Casa Rosada.

Un dato revela que para hoy mismo no se esperan grandes anuncios: Alberto Fernández y el jefe de Gabinete Santiago Cafiero se encuentran de visita en Chile. Cualquier definición se tomará al regreso del Presidente, indicaron las fuentes consultadas.

La apuesta oficial es a poner en marcha el pacto de precios y salarios ya en febrero.

En la CGT se entusiasman con el plan, aunque tienen reparos. “Del lado sindical si nos garantizan que cae la inflación y se recupera el salario, cierra”, apuntó un jerárquico de la central sindical peronista. Y agregó: “Es el buen camino”.

Eso sí, los dirigentes cegetistas advirtieron que se deberán sostener las negociaciones paritarias durante este año para garantizar que “no pierdan los salarios contra los precios”. Las mismas fuentes también plantearon que este año “los salarios deben recuperar entre 2 y 4%”.

Jefes gremiales que fueron informados por funcionarios de los detalles del plan, dijeron que la única forma de que el pacto funcione es “sentando a los cerealeros, a los fabricantes de acero y aluminio, a los formadores de precios y ser muy rígidos con ellos. Pero también asegurarles una política tarifaria, un valor del dólar, ver la cuestión de la presión impositiva”. Y alertaron: “Si los precios

La CGT se entusiasma con la idea, pero habla de recuperar los salarios “entre 2 y 4%” este año, se van al diablo, olvidate”.

Los empresarios dudan

Del lado empresario ayer solo manejaban trascendidos sobre la inminente puesta en marcha del pacto de precios y salarios. Pero también mostraban sus dudas sobre el plan.

“Si lo que se busca es solo un acuerdo de precios y salarios veo un resultado improbable. Lo que considero necesario es un acuerdo de económico y social con medidas de fondo para la emergencia”, dijo a Clarín Daniel Funes de Rioja, vice presidente de la UIA y titular de la Copal, la poderosa cámara empresaria que nuclea a casi la totalidad de los sectores que conforman la industria de alimentos y bebidas de la Argentina.

Entre las medidas de fondo, Funes de Rioja mencionó las tarifas, el valor del dólar, el gasto público y la cuestión fiscal.

Otras fuentes del sector industrial objetaron que un acuerdo de estas características no puede cerrarse con “salarios sueltos (en referencia a las negociaciones paritarias) y precios de los alimentos que están congelados desde marzo del año pasado”.

También apuntaron que “las paritarias cortas van contra del sentido del plan que quiere poner en marcha el Gobierno”, en referencia a que hay sindicatos que empezaron a negociar acuerdos salariales por solo 3 ó 6 meses.

El atraso de los precios

En la industria de la alimentación apuntaron que antes avanzar con un acuerdo se debería tener en cuenta “el atraso que hay en los precios de los alimentos salidos de fábrica. El atraso no es menor al 25%, pero dependiendo del producto puede ser del doble”.

Hace dos semanas, en una charla en la Universidad Nacional del Comahue, el ministro Guzmán defendió un acuerdo como el que ahora buscarán poner en marcha: “Las políticas de precios e ingresos son necesarias para coordinar expectativas. Se van a usar en 2021 como parte de un esquema integral para atacar el problema de la inflación. Los acuerdos de precios y salarios son efectivos para anclar las expectativas”.

Anoche, en una ponencia sobre “tranquilizar la economía” -fue en la Universidad Nacional de La Pampael ministro de Economía volvió a referirse a precios y salarios.

“Los acuerdos de precios no son per se la política antiinflacionaria. Son un elemento de un esquema integral de política macroeconómica”.

Planteó, además, la necesidad de asegurar “que el salario real crezca, es necesario para la recuperación económica. Tiene que crecer el salario real. Pero pensando desde lo macro, lo que se apunta es a una política de precios e ingresos que logre que aquello que es factible, ocurra”.

Fuente: Clarín