Multilatinas: el camino para las fintech argentinas

Multilatinas: el camino para las fintech argentinas

El ecosistema fintech argentino tiene una enorme oportunidad en América Latina. Por qué los modelos B2C corren riesgo si se limitan solo al mercado local.

Por Tomás Costantini, founder y presidente de Miiii

América Latina vive una revolución fintech. Y lo más estimulante es que recién está empezando. La mayoría de las 650 millones de personas que viven en la región no están bancarizadas. En Brasil y México, los dos mercados más grandes, menos del 33% tienen acceso al crédito, y la mayoría de estas personas son clientes del sistema financiero tradicional, que por ahora no ha demostrado estar a la altura de los tiempos que corren. Pero la región es escenario de una disrupción que llama la atención en todo el mundo. Con 33 millones de clientes y una valuación de US$ 25.000 millones, Nubank es hoy el neobanco más grande del planeta. Un caso que, sin embargo, todavía no iguala las hazañas de Mercado Libre, líder indiscutido del ecommerce en América Latina, presente en 18 países, con 76 millones de usuarios y un valor de mercado que supera los US$ 77.000 millones.

Estos números muestran, a priori, dos cosas:

Primero, que nuestra región demanda soluciones innovadoras y valora la aplicación de tecnología en sus transacciones y compras. Y en segundo lugar, que es posible construir compañías locales de escala. Y todo esto a pesar de las severas y recurrentes crisis económicas que afectan a nuestros países. Según el informe “Tecnolatinas” de Surfing Tsunamis y el BID, mientras las 40 mayores compañías públicas de la región perdieron US$ 489.000 millones de capitalización en la última década, las startups de tecnología pasaron de valer US$ 7.000 millones en total a más de US$ 221.000 millones.

En una región marcada por la inestabilidad y el riesgo, la consolidación de un grupo de empresas que innovan en tecnología desde América Latina para América Latina, es motivo de orgullo. Y es una inspiración para quienes emprendemos en el ecosistema fintech. Porque tenemos la certeza de que, haciendo las cosas bien, el potencial de crecimiento es enorme.

Sustentabilidad de proyectos fintech

Pero la sustentabilidad de los proyectos fintech es menos clara si la estrategia se concentra solo en nuestro país. Por supuesto, no todo el ecosistema tiene modelos B2C ni necesita escalar demasiado para ser sustentable. Las 268 empresas que relevó la Cámara Argentina de Fintech en su último informe muestra que el ecosistema es muy variado: la mayoría pertenecen a los verticales de pagos (64) y préstamos (60), y luego son muy numerosas las que se dedican a servicios B2B (34) o proveedoras de tecnología (34).

Muchas de estas empresas compartimos ambas categorías: Miiii es la solución líder en gestión de la vida en comunidades y a la vez provee servicios de fintech as a service para retailers y otros partners. La escala de cada una de las fintech argentinas depende de su propio roadmap. Pero la mayoría sabe que “pensar local” ya no alcanza. Y es más, “pensar local” hoy es pensar en América Latina.

El desembarco de Ualá en México, el éxito de la insurtech 123Seguro en Brasil, muestran que el ambiente natural para que se desarrolle el ecosistema fintech argentino es la región. Con países como Colombia, Perú, Paraguay o Chile compartimos idiosincrasia, llevamos décadas trabajando juntos y sabemos que la cooperación nos ha llevado a hacer grandes cosas. Y lo más importante de todo es que tenemos el talento.

Los modelos B2C (directo al consumidor) necesitan una hipótesis fuerte de alcance de mercado. Durante mucho tiempo creímos que alcanzaba con Argentina. Y la decepción en algunos casos fue fuerte. Hoy sabemos que nuestro mercado es fundamental para una estrategia más ambiciosa, que incluya a América Latina. Tenemos la capacidad, tenemos la fuerza y tenemos en quiénes inspirarnos. El destino de las fintech argentinas es latinoamericano.