Mercado. Euforia subibaja para las acciones tech

Mercado. Euforia subibaja para las acciones tech

Las acciones de Spotify terminaron su primer día de operaciones en $ 149.01, un descenso de más del 10 por ciento desde su precio de apertura de $ 165.90 pero aún muy por encima de donde la compañía de transmisión de música había sido valuada por última vez en transacciones privadas.

Este no e sun dato menor y hasta es alentador para varios analistas, que además consideran las advertencias de Spotify acerca de que el precio de las acciones podría ser volátil. ¿Por qué? porque la misma compañía dijo querer «evitar las trampas de una oferta pública inicial», y de la función del llamado «agente de estabilización» que por lo general es un banco que comprar y vender acciones para estabilizar el precio.

La compañía comenzó a operar el martes en la Bolsa de Valores de Nueva York a través de una cotización directa no convencional, dejando de lado el proceso tradicional de una oferta pública inicial. Así es que incluso con el declive, el primer día de comercio público terminó con Spotify por valor de $ 26.5bn.

Sin duda, queriendo seguir los pasos de Facebook, Twitter, Snapchap o Dropbox (la última gran tecnológica en salir a Bolsa en marzo pasado) Spotify se suma a la bolsa para capitalizarse. Aunque bien vale aclarar, los  debuts bursátiles de sus predecesoras fueron auspiciosos, sus trayectorias no siempre se mantuvieron en terreno positivo.

Ese es el caso de Snapchat. Sus acciones se dispararon un 44% en el primer día de cotización logrando recaudar u$s 3400 millones. Aun cuando en los días previos había
informado que no era rentable, los inversores se mantuvieron optimistas hasta que Snapchat publicó su primer balance como empresa abierta, en el que reportó pérdidas por u$s 2200 millones; fue cuando el papel bajó desde sus u$s24,48 iniciales hasta los u$s14,8 a los que cerró este martes 3 de abril.

Inversores, banqueros y ejecutivos de Silicon Valley seguirán de cerca las operaciones en los próximos días para evaluar si el proceso de cotización directa no convencional -que consideran más transparente y genuino unos o sin red otros- puede ser atractivo para otras grandes compañías tecnológicas de alto perfil con características similares a Spotify.

Una anécdota para cerrar esta nota. La Bolsa de Nueva York suele homenajear a las empresas que hacen su debut bursátil con intervenciones en la majestuosa fachada de su edificio clásico. Lo que nunca pensaron era que en esta celebración, confundirían la nacionalidad de origen de la aplicación de música sueca lanzada en 2006 e izaron en la fachada una bandera de Suiza. Advertidos por el error, finalmente quedaron tres banderas norteamericanas, tal como se ve en la foto que acompaña estas líneas.