Maduro evalúa la situación para abrir el negocio petrolero

Maduro evalúa la situación para abrir el negocio petrolero

Caracas quiere triplicar la producción de crudo ante la debacle de la economía. Hubo encuentros con la patronal Fedecámaras y otros líderes locales privados.

Inicio de sondeos

El régimen de Nicolás Maduro inició sondeos y una campaña de seducción sobre empresarios venezolanos para lograr apoyo en su anunciado plan de triplicar la producción petrolera desde los actuales 400 mil barriles diarios a 1,5 millones.

Como parte de la estrategia, el presidente viene reforzando en los últimos días sus invitaciones a hombres de negocios locales y extranjeros a invertir en Venezuela para reactivar la moribunda economía nacional.

La actividad del lider chavista sigue al anuncio del viernes pasado del titular ministerial del área energética y jefe de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), Tareck El Aissami, quien reveló que la compañía deberá aumentar la producción de crudo y también la del gas, aun cuando no especificó cómo y en qué condiciones.

El problema es que, desde que el chavismo tomó el poder hace 22 años, la producción petrolera ha venido cayendo de 3,5 millones de barriles diarios a los 400 mil actuales. Otro tanto ocurre con la refinación de nafta, cuyas cinco plantas están paralizadas.

Los que siguen de cerca la actividad sostienen que las refinerías dejaron de recibir inversiones, lo que colapsó el sistema, agravado por hechos de corrupción. PDVSA además perdió enormes planteles de técnicos que fueron despedidos o se marcharon y la empresa quedó en manos de funcionarios que llegar a puestos claves por acomodos con el poder.

El plan de Caracas

El plan anunciado por Caracas busca revertir las nacionalizaciones que llevó adelante Hugo Chávez. El nuevo esquema está negociado con Rusia, el principal socio internacional de Venezuela. La autocracia rusa ha sido muy crítica de los sistemas de asistencia social puestos en marcha por el chavismo y plantea la necesidad de una apertura al capital privado del negocio petrolero para aumentar la producción. Es por eso que el líder del régimen, Nicolás Maduro, invitó el último viernes a las petroleras norteamericanas a que regresen al país.

Fedecámaras

Asimismo, el jerarca de Miraflores también ha hecho guiños a la patronal Fedecámaras durante una reunión convocada por el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez.

Fedecámaras respondió al llamado afirmando que “sólo alcanzaremos progreso social y crecimiento económico, en el momento que se garantice la libertad, la democracia, la libre iniciativa, el derecho a la propiedad privada y el estricto apego a la Constitución”, según un comunicado en el que detalló el encuentro.

Algunos de sus miembros pidieron a Maduro la emisión de permisos para que los empresarios “puedan operar las gasolineras e importar combustible como una solución a la crisis energética que vive el país”.

El gremio empresarial también reclamó el “otorgamiento de concesiones en condiciones transparentes a empresas privadas para actividades de refinería, expendio y demás actividades de comercialización de combustible”.

El economista y experto petrolero Jose Toro Hardy no se mostró confiado con los planes de Maduro. “Económicamen

te las alternativas que ofrece el régimen con su inconstitucional ‘Ley Antibloqueo’ (la norma que autoriza al presidente a negociar acuerdos petroleros) no son factibles. Presenta, sí, buenas oportunidades de negocio para algunos allegados y enchufados, pero resultan aberrantes para el país”, comentó.

A su turno, el economista y director de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros, dijo que “las reformas económicas de Maduro son para darle estabilidad política a su gobierno”. Es como surfear en la crisis, indicó, pero “falta mucho por ver si esa estabilidad se traduce en progreso para la nación”.

El líder chavista cuenta con sus aliados y socios de Rusia, China, Irán, Turquía y hasta de Cuba para reactivar la deprimida economía nacional que el año pasado cerró con una caída brutal de 30% del PIB.

La escasez de gasolina llevó a Maduro a eliminar en mayo pasado el histórico subsidio que tenían las naftas venezolanas, que las hacía de las más baratas del mundo, con costos de apenas un dolar por tanque de combustible, después de advertir que, ante la caída de la refinación, las gasolinas debían importarse desde Irán.

Fuente: Clarín