El presidente Mauricio Macri cuestionó a la oposición al señalar que «dejaron ruinas, deudas y problemas y ahora tienen la caradurez de decir que ellos lo van a solucionar».

En una recorrida por la provincia de Corrientes,  Macri planteó -sin nombre propios- que el espacio que encabeza la ex presidente «quiere meterle miedo, diciendo cuidado con esto, con lo otro, y es la vuelta a la resignación».

«Nosotros decimos basta, no les creemos más, no nos volverán a engañar porque creemos en la verdad, la transparencia, con las manos limpias», afirmó.

Durante la arenga, el jefe de Estado le pidió a los correntinos «paciencia para que el cambio llegue a todos» y aseguró que el país «ya está creciendo». «El carro ya salió del barro y está tomando velocidad, estamos creciendo, crece la industria, crece la construcción, la industria automotriz, la energía», señaló.

 Y agregó: «Sabemos que después de cinco o seis años sin crecimiento, que el crecimiento de ahora todavía no llegó a todos, pero empezó. No vamos a parar hasta que el crecimiento llegue a cada rincón de la Argentina».

En ese marco, el Presidente admitió que «la inflación es la que nos destruye, no nos permite crecer y es una de las tantas mentiras que nos dijeron y la tenemos que desterrar».

En otro tramo del discurso, volvió a apuntar contra «las mafias del narcotráfico y la del juicio laboral» y prometió «desterrarlas de la Argentina».

Macri estuvo acompañado por el gobernador local, Ricardo Colombi, el candidato oficialista a gobernador Gustavo Valdés, el intendente de la capital provincial Cambiemos recientemente electo- Eduardo Tassano y los precandidatos a legisladores nacionales.