Los drivers del Merval, ¿seguirá el rebote?

Los drivers del Merval, ¿seguirá el rebote?
“La semana pasada fue sobresaliente para los inversores, y aunque faltan bastantes más en la misma sintonía para recuperarse a los niveles pre-crisis, de abril, existe detrás de este comportamiento un combo de noticias, datos y hasta rumores que nos permiten sostener que la recuperación puede tener bases más sólidas que las del último tiempo. Igual, y vale acá aclarar, la posibilidad de volver rápidamente a los máximos (en dólares) es algo que descartamos de corto plazo. En otras palabras, mucha agua bajo el puente aún debe correr” apura la explicación Matías Roig, Director de Portfolio Personal.
“Si marcamos algunos números que alegraron a los inversores en la llegada de la Primavera, hablamos en principio del dólar, el riesgo país -como reflejo de la suba en los bonos- y las acciones.”
“El billete primero podemos decir se estabilizó -con ayuda del BCRA en su inicio-, y después cedió hasta la zona de $ 37.5. Niveles 5.3% debajo del de hace una semana. Surfeando con éxito, y como un punto no menor, una nueva licitación de Lebac que volvió a apuntar (como se conoce) a un desarme del stock en el sector privado”, explicó Roig.
En este marco, el resto de los activos financieros pudieron mantener la recuperación de la semana previa, e incluso acelerarla. Así, el Credit Default Swap (CDS) a 5 años, como reflejo del riesgo argentino, cayó a la zona de 540 puntos; esto implica una baja de casi 300 puntos sobre los niveles de principios de septiembre (835 p.b.) y niveles similares a los mediados de agosto –es decir, antes del nuevo cimbronazo en el tipo de cambio, en donde lo que se disparó es la probabilidad de un default más temprano que tarde-.”
Respecto de los bonos, para Matías Roig “los títulos soberanos en dólares acumularon así ganancias de hasta 5% en la semana, y de hasta 13% en lo que va de septiembre, las mayores, con lógica, en la parte más larga. La curva de rendimientos normalizó su pendiente, con tasas de entre 5.5% y 10% anual, a lo largo de la misma. Hace poco más de dos semanas atrás, la sobre-reacción exagerada -desde nuestra visión- de un probable escenario de impago, la había llevado a mostrarse plana en rendimientos de entre 10-12.5% anual para bonos con durations de 1 a 11 años. Incluso como dato positivo, en la semana, comenzaron a verse movimientos en la curva de bonos provinciales. La oportunidad de aprovechar arbitrajes entre curvas, y entre posiciones dentro de la misma, vuelve a ser una opción para algunos tipos de inversores.”
“Por otra parte, -continúa Matías Roig- debemos resaltar la licitación de una nueva Letra del Tesoro en dólares (Lete) que se llevara a cabo esta semana. Se trata de una sola reapertura de la Lete con vencimiento el 12 de abril (196 días), la cual tendrá una tasa nominal mínima del 6% anual. Nos parece una opción atractiva para un inversor con un perfil conservador. Además, la tasa mínima es interesante, incluso si la comparamos frente al tramo corto de la curva de bonos en dólares. Para tener una referencia, el AA19 que vence durante la segunda quincena de abril –plazo similar- conserva una TIR de alrededor del 5.8%.”
Respecto a la renta variable, para el Director de Portfolio Personal, el escenario “no es muy diferente”.
“La recuperación de la última semana impulsó al Merval a recuperarse a niveles arriba de los 34.000 puntos, zona cercana a los máximos de 35.500 de enero. Desde los mínimos intradiarios de fines agosto, la suba acumulada es del 42.6%, con líderes que subieron hasta 83.6%. No obstante, analizar este comportamiento de forma aislada al tipo de cambio, es un poco ingenuo (e irreal). En dólares, y aún con una recuperación de hasta el 15% en estas últimas dos semanas, las pérdidas acumuladas en el año son de hasta 69% -ante un Merval que cae 43%-. A esto, además, habría que agregarle la selectividad por sector. Pero dicho este escenario, debemos volver al primer párrafo con dos preguntas: las bases de esta recuperación, y la continuidad de la misma. La primera, encuentra una respuesta positiva, en los fundamentals. No hablamos lógicamente del nivel de actividad, desde el cual seguirán llegando de corto datos malos, sino de la corrección que finalmente se espera –aun cuando no sea inmediata- de los desequilibrios macro-“ puntualiza Matías Roig.
También entran en este “juego” como catalizadores positivos para los precios, otras señales financieras y políticas. “En lo último el avance en el Proyecto de Presupuesto de 2019 que entiende un acuerdo con las provincias; y en lo financiero de lo que se habla, es del despeje de las necesidades financieras del próximo año y medio. Esto fundamentado, en parte y algo que debemos entender, en no sólo un adelantamiento de los fondos por el FMI (algo que ya se sabía) sino en la probabilidad de que el paquete inicial de USD 50.000 millones se termine ampliando. Veremos… De hecho, la atención a la letra chica –y no tanto- del nuevo acuerdo es lo que espera básicamente hoy el mercado para dar un nuevo salto en los precios, o tener una excusa para (en el mejor de los casos) un nuevo Wait&See. Recordemos como premisa que el mercado siempre se adelanta.”
“¿Cuánto más pueden subir las cotizaciones? Un buen punto es que el escenario externo (y algo que hizo en las últimas semanas) parece apoyar –y se entiende lo seguirá haciendo- a los emergentes en general. Los flujos hacia la región parecen volver a recuperarse, aunque no se podrá evitar cierta volatilidad. No obstante, ya estamos acostumbrados. El apetito por riesgo argentino vuelve así, al menos, a tenerse en cuenta. Otro buen punto es que la recuperación de los precios de los activos financieros desde los mínimos ha sido fuerte, y los argumentos de la misma nos permiten con un grado alto de probabilidad, pensar que lo peor ya pasó. Esto no implica que volver a los máximos será simple, directo e inmediato”, concluyó Matías Roig, Director de Portfolio Personal