La pelea en el oficialismo vuelve a crecer y todas las miradas se concentraron en la reaparición de CFK

La pelea en el oficialismo vuelve a crecer y todas las miradas se concentraron en la reaparición de CFK

Después de algunos días en que el foco estuvo corrido a los conflictos en la oposición, la interna del oficialismo vuelve al centro de la escena. Este viernes, dos meses después del ataque sufrido en las puertas de su piso de Recoleta, Cristina Fernández de Kirchner volverá a encabezar un acto público. En la previa, Alberto Fernández envió señales contrapuestas. Volvió a cargar sobre la Justicia, algo que fue interpretado como un gesto hacia la ex presidente, y después -por intermedio de su vocera- rechazó las presiones por la anulación de las PASO.

CFK hablará en un acto organizado por la UOM. La presencia en un encuentro sindical es un dato político en sí mismo. Y existe expectativas por el sentido del discurso: se supone que además del tema judicial, apuntaría a fijar línea interna y cuestionaría algunos aspectos de la situación económica, por el impacto de la inflación.

El fin de semana estará marcado por el kirchnerismo. El sábado, Máximo Kirchner encabezará un acto del PJ bonaerense. La situación socioeconómica y el desafío electoral vienen siendo tema central de debate en el peronismo de Buenos Aires. Retener la gobernación de la provincia es el principal objetivo K para el 2023.

No serán las únicas movidas públicas. El kirchnerismo ya trabaja en la organización del acto por el 17 de noviembre, denominado Día de la Militancia. También tendrá como principal figura a Cristina Kirchner. Y la intención es armar una fuerte movilización en los días previos al pronunciamiento del Tribunal Oral Federal que tiene en sus manos la causa Vialidad.

Alberto Fernández se pronunció con dureza contra la resolución de la Cámara Federal que dispuso la libertad de cuatro integrantes del grupo Revolución Federal. Pocas horas después resultaron procesados en la causa que lleva el juez Marcelo Martínez de Giorgi bajo la imputación de “imponer sus ideas o combatir las ajenas por la fuerza o el temor”.

El Presidente aprovechó además para enviar un mensaje ácido a la Corte Suprema, que está en el centro de la ofensiva kirchnerista en el terreno judicial. Sin embargo, los proyectos del oficialismo sobre la Justicia siguen frenados en el Congreso.

Las señales de tensión con el kirchnerismo estuvieron a cargo de Gabriela Cerruti. La vocera rechazó la posibilidad de unificar posiciones para dar batalla en el Congreso por la derogación de las PASO. Si el bloque de diputados no avanza antes de fin de mes por su cuenta, el tratamiento en diciembre dependería del Ejecutivo y el mensaje fue que no iría a extraordinarias.

También Victoria Tolosa Paz, ahora ministra de Desarrollo Social, agregó una crítica implícita al kirchnerismo. Descalificó los cuestionamientos a la gestión desde el interior del Frente de Todos. Dijo que actúan “como si estuvieran afuera” del Gobierno.