El patentamiento de vehículos eléctricos trepó 146% en Europa

El patentamiento de vehículos eléctricos trepó 146% en Europa

El patentamiento de vehículos eléctricos en los cinco más grandes mercados de la Unión Europea se incrementó un 146% interanual en el tercer trimestre del año.

Esto ratificó la aceleración de aplicación de la tecnología digital y remota, según el informe «E-Mobility Sales Review Q4 2020» de Strategy de la consultora internacional PWC.

Durante el cuarto trimestre del 2020 Europa sigue siendo el principal mercado de venta de vehículos eléctricos en el mundo.

Tanto por el crecimiento de las ventas como por el incremento de su cuota de mercado.

Sólo en el tercer trimestre del año, la matriculación de vehículos eléctricos nuevos alcanzó las 539.000 unidades.

Lo hizo en los cinco principales países de la UE: Francia, Alemania, Italia, España y Reino Unido.

El crecimiento en el patentamiento de vehículos eléctricos llegó al 146% más respecto al mismo periodo del año pasado.

Además, los cinco mercados más pequeños como Austria, Holanda, Noruega, Suiza y Suecia, cuentan con un incremento del 128%, con 711.000 unidades.

Nuevas pautas de consumo

Jorge Zabaleta, socio de PwC Argentina, explicó que «las preferencias de movilidad de los consumidores están cambiando rápidamente en base a la comodidad y la tecnología».

Y entendió «primordial que la industria se adapte rápidamente a las nuevas necesidades y expectativas de los consumidores».

«A medida que las ventas se aceleran, las primera empresas que apostaron por este negocio, están empezando a recoger los frutos de su trabajo».

Para el informe de PWC, el nivel de ventas refleja el aumento del interés por parte de los consumidores europeos por este tipo de vehículos.

Y al mismo tiempo «la implementación de la tecnología digital y remota está acelerando la adopción de CASE (por sus siglas en inglés, Connected, Autonomous, Shared y Electric)».

También gracias a las numerosas iniciativas y programas de incentivos que se han puesto en marcha.

Alemania, por ejemplo, tiene previsto aumentar, a partir de 2021, la tributación de los coches nuevos de combustibles fósiles.