El Gobierno paga US$ 700 millones a los bonistas de la deuda reestructurada por Guzmán

El Gobierno paga US$ 700 millones a los bonistas de la deuda reestructurada por Guzmán

Se trata del segundo vencimiento de la deuda reestructurada en 2020 por Guzmán. Los pagos que vienen.

Exposición. Martín Guzmán habla ante gobernadores oficialistas el último jueves.

El Gobierno afrontará este lunes el pago de intereses de US$ 690 millones a los acreedores privados del extranjero.
Se trata del primer vencimiento de deuda del año, correspondiente al segundo cupón por los nuevos bonos lanzados tras el canje de septiembre de 2020, cuando fueron reestructurados títulos bajo ley extranjera por un total de US$ 66.000 millones.

El Banco Central giró los fondos a la cuenta del Tesoro el viernes pasado previo al vencimiento previsto para ayer domingo 9 de enero, lo que impactó en las reservas, pero la operación terminará de concretarse este lunes, en el primer día hábil de la semana.

“Los fondos ingresan mañana (por hoy)”, confirmaron este domingo fuentes oficiales.

El pago tendrá lugar en medio de las presiones renovadas de un grupo de bonistas duros (Argentina Exchange Bondholders Group), asesorados por el ex abogado del fondo buitre de Paul Singer, Dennis Hranitzky, que se mostraron preocupados la semana pasada por el nivel de reservas y la falta de un acuerdo con el FMI, que les de más garantías de cobro a los acreedores.

“A pesar de una cosecha récord, precios máximos de una década y una ganancia inesperada de DEG de US$ 4.300 millones, Argentina finaliza 2021 con reservas netas de US$ 2.600 millones. Y parece que el Banco Central decidió vender el oro”, aseguraron en Twitter los bonistas, que en 2020 aceptaron la reestructuración del ministro de Economía, Martín Guzmán.

Las diferencias por el nivel de ajuste fiscal reveladas el miércoles por el funcionario pusieron más nerviosos a los mercados y gatillaron caídas del 4% en los bonos en las dos ruedas siguientes.

“El impacto sobre las reservas ya lo tuviste el viernes. Luego, los bonos vienen muy castigados, es positivo que se pague, pero eso no cambia la tendencia”, dijo el analista financiero Christian Buteler.

La cancelación será la primera de una seguidilla desde este mes hasta marzo.

Entre bonistas externos y organismos multilaterales, suman un total de US$ 4.883 millones, de los cuales US$ 3.895 millones corresponden al FMI, un volumen superior a las reservas netas estimadas por los analistas.
Según los cálculos de Guzmán, la carga de deuda -incluyendo al sector privado nacional- es de US$ 28.000 millones en 2022 y US$ 30.000 millones en 2023.

De ese total, los menores pagos corresponden a los bonistas privados tras la reestructuración que habría permitido ahorrar US$ 34.500 millones entre 2020 y 2030.

Aquel acuerdo generó pagos de amortizaciones e intereses por cerca de US$ 4.000 millones desde 2020 a 2024 y US$ 42.700 millones del 2020 al 2030, según cálculos de la Oficina de Presupuesto del Congreso.
Fue a través un esquema “step up” (escalonado) con cupones crecientes desde 2021 en forma semestral, por lo que el próximo será en julio.

“En julio la estructura de cupones empieza a devengar un pago mayor, algo que le puede empezar a poner piso a los bonos, pero por ahora la principal variable sigue siendo acumulación de reservas, porque los vencimientos pueden pagarse en tanto haya excedente de reservas, cosa que no sucede”, dijo Leonardo Chialva, director de Delphos Investment.

Para los analistas, el vencimiento de este domingo se da en marco “enrarecido”.
“No hay problemas para el pago, pero se vuelve más exigua la ecuación sin acuerdo con el FMI y la pobre presentación de Guzmán muestra que, no viene muy bien la negociación”, señaló Gustavo Neffa, director de Research for traders.

Fuente: Clarín