Inyectaron $ 22.700 millones para amortiguar la caída de las Pymes

    • (Perfil) – El Gobierno volcó al sector $ 22.700 millones entre unas 300 mil firmas que adhirieron al programa incluído en la ley Pyme para morigerar los efectos de la caída de la actividad en el empleo.
“Las pymes industriales necesitan financiamiento bancario por US$ 1.400 millones  adicionales a los ya disponibles en el mercado. El 60% de estos fondos son demandados por empresas inversoras que necesitan ampliar sus proyectos, algunos ya en curso”, detalló un informe reciente del Observatorio Pyme.
Entre las más afectadas están  las del sector de alimentos y bebidas –necesitan US$ 336 millones– y metalmecánicas, por US$ 187 millones. Textiles, calzado y marroquineria, las apuntadas para reconvertir sus procesos productivos, no logran financiamiento por US$ 169 millones.
Uno de los sectores más presentes es el agrícola. “El 53,6% del agro ya es parte de la ley pyme”, según señaló el titular de Agroindustria, Ricardo Buryaile, sobre el motor estrella de la economía. El recurso de devoluciones impositivas  y exenciones fue muy utilizado por el sector para paliar efectos de sequías e inundaciones.
En Santa Fe, por ejemplo, el 86% de las pymes del campo se sumó a la ley.  Es una de las pocas provincias donde, en una lectura electoral, el peronismo venció en las urnas el fin de semana pasado y se alejó así del resultado dominante a favor de Cambiemos que tuvo en las presidenciales de 2015. El 44% de las firmas industriales se sumó al sistema, así como el 40% de los comercios.
En el NEA, Formosa es la más participativa, con el 36% de sus empresas. En Cuyo, Mendoza y San Luis lideran el registro provincial, con 27 y 24% en general. La adhesión en el NOA es la más baja en promedio: Salta tiene al 19% de sus pymes en el programa y Jujuy sólo al 11%. El ahorro promedio por empresa marca que las pymes de La Rioja accedieron a beneficios por $ 67.943 por empresa mientras que en Jujuy fue de $ 65.524.
El menor impacto se dio en La Pampa, con $ 17.647 por empresa. El ahorro por el impuesto al cheque fue de $ 2.600 millones y el sector más beneficiado fue la industria: $ 1.310 millones, mientras que comercio evitó el pago de $ 720 millones y servicios, $ 330 millones. En total alcanzó a 55 mil empresas.
La cuenta oficial agrega $ 960 millones en descuentos del impuesto a las ganancias  por inversiones productivas y más de $ 1.000 millones “liberados por la eliminación del impuesto a la ganancia mínima presunta”, detallaron desde Producción. Entre octubre de 2016 y junio pasado, se volcaron más de $ 5.100 millones en IVA diferido a 90 días, un beneficio que es para micro y pequeñas.
“El 80% de la demanda insatisfecha de financiamiento se concentra en el área metropolitana de Buenos Aires y la región centro”, explican. Como contrapartida, desde Producción pusieron en juego $ 13 mil millones a través de programas oficiales y los créditos del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), lo que representa el 57% del gasto en pymes desde que se reglamentó la ley sectorial.
En total, el universo pyme alcanza a 850 mil empresas, por lo que todavía “falta mucha difusión”, según indicaron en el Gobierno, donde de todas formas destacan que la Sepyme antes alcanzaba a sólo 16 mil empresas con sus programas. La gira en las provincias será una constante en los próximos meses, con la vista puesta en las legislativas de octubre. El sector pyme es reponsable por el 70% de los puestos de trabajo del país.
La provincia con mayor número de pymes agrícolas registradas es La Pampa, con un 94%, donde domina Cambiemos. En el caso de las pymes industriales, el 42% se sumó al régimen sectorial.
En la Patagonia, el programa no está muy difundido: la provincia con mayor adhesión es Neuquén, con sólo el 26% de sus pymes, un distrito donde mejoró la preferencia por Cambiemos en las primarias abiertas del domingo pasado en relación con las presidenciales de 2015.
Córdoba, Entre Ríos y Buenos Aires también tienen altos niveles de adhesión entre las pymes agrícolas (86, 67 y 68%, respectivamente), mientras que en las industriales es menor, aunque están entre las tasas más altas para el segmento (41, 37 y 32%).