El esfuerzo monetario comienza a dar frutos

El esfuerzo monetario comienza a dar frutos
Los primeros meses de la nueva política monetaria parecieran estar teniendo los efectos buscados por el BCRA, anclando las variables nominales y frenando el deterioro de las expectativas de inflación. Pese a esto, los efectos de la inestabilidad reciente seguirían pesando y mantendrían a la inflación elevada durante los primeros meses de 2019. A partir del segundo trimestre, comenzarían a verse de forma más contundente los efectos de la extrema dureza monetaria, alimentando una fuerte desinflación de cara a la elección.

 

Se aleja el déficit cero, presionando sobre la sostenibilidad de la deuda

Los datos fiscales de noviembre confirmaron que el gobierno no habría tenido mayores complicaciones para cumplir con su meta de 2018. No obstante, también revelaron que la dinámica fiscal comienza a enfrentarse con algunos obstáculos importantes que alejarían a Argentina del equilibrio primario en este año, especialmente a medida que la recesión asuma un mayor impacto sobre los ingresos y la desinflación eleve el peso del gasto indexado. Pensando más allá de 2019, los desafíos que enfrentará la política fiscal serán mayúsculos y el gobierno tendrá que encarar un ajuste de casi 4pp del PBI hacia 2021, debiendo impulsar una agenda de reformas fiscales estructurales. Junto con el financiamiento del FMI, el ajuste fiscal alcanzaría para que la deuda neta se mantenga sostenible en el mediano plazo, aunque aún vulnerable ante shocks.

Fuente SBS