El déficit comercial con Brasil aumento del 150%, ya superó el total de 2022

El déficit comercial con Brasil aumento del 150%, ya superó el total de 2022

El déficit comercial bilateral acumulado en los primeros 5 meses de 2023 llegó a US$ 2.537 millones y, con un aumento del 150%, ya superó el total de 2022. Es el peor año desde 2018, previo a la crisis cambiaria

En mayo, Argentina mostró nuevamente un elevado déficit comercial bilateral con Brasil. En concreto, fue de US$ 763 millones, un guarismo similar al mes anterior (US$ 776 millones) y entre los más deficitarios de los últimos cinco años.

“Contra mayo de 2022 la suba del rojo comercial bilateral fue del 21,7%. Sin dudas el salto de la importación de soja para molienda (+531,2%) que alcanzó un récord nominal de nada menos US$ 500 millones en un contexto de escasez interna de la oleaginosa producto de la sequía, impactó muy negativamente en el déficit comercial de mayo que resultó 129,1% más alto que el promedio del primer trimestre (US$ 333 millones)”, indicó Abeceb en un informe.

Así, en los primeros cinco meses del año la Balanza comercial bilateral con Brasil lleva acumulado un déficit de US$ 2.500 millones, o sea 2,5 veces superior al de igual lapso de 2022. Sólo hasta mayo el déficit ya supera todo el rojo bilateral de todo 2022 completo (US$ 2.245 millones).

La más grandes de los últimos cinco años

Más allá de que la sequía se trata de un shock transitorio cuyos efectos se disiparán hacia adelante, “lo cierto es que ha contribuido a que Argentina alcance uno de los déficits comerciales bilaterales mensuales (junto al de abril) más grandes de los últimos cinco años, en un contexto donde el BCRA se encuentra con reservas negativas a pesar del reciente dólar soja 3 y las negociaciones de Sergio Massa en China no lograron conseguir ayuda por parte del BRICS para la financiación de importaciones”, señaló Abeceb.

Las importaciones desde Brasil crecieron 32% interanual en el mes de mayo, por encima del 26,2% verificado en el primer cuatrimestre y alcanzaron los US$ 1.927 millones, el valor nominal más alto desde noviembre de 2011.

Las importaciones se vieron traccionadas por el sector agropecuario donde sólo la importación récord de soja explicó el 25% de las importaciones argentinas a Brasil del mes en un contexto en que la sequía en Argentina se da en simultáneo con una súper cosecha en Brasil.

Mientras las importaciones crecieron fuerte, las exportaciones argentinas a Brasil, en cambio, mostraron una caída interanual del 4,8% hasta US$ 1.164 millones. “Esto es una fuerte desaceleración frente al crecimiento de las exportaciones del primer trimestre de 2023 (+15,2%), que estuvieron traccionadas por el importante crecimiento del sector automotriz, pero ya comenzó a verse el fuerte efecto negativo de la sequía en los guarismos exportados”, apuntó Abeceb.

¿Cómo sigue la película?

Con todo, durante los primeros cinco meses del año las importaciones desde Brasil alcanzaron los US$ 7.540 millones (+27,6%), reduciendo levemente el ritmo de crecimiento en relación con el de 2022 (+29,2%) mientras que las exportaciones totalizaron US$ 5.003 millones (+4% vs +9,6% el año pasado).

“De esta manera, el déficit comercial bilateral acumulado en los primeros cinco meses del año llegó a US$ 2.537 millones, con un aumento del 150% que llevó a superar el total de déficit de 2022 (US$ 2.245 millones, que no fue un déficit pequeño sino en línea con el promedio de los últimos 20 años). De esta manera, hay que remontarse hasta el 2018 para encontrar un rojo comercial mayor -en este entonces fue de US$ 3.183 millones en los primeros cinco meses-”, recordó Abeceb.

Importación de soja

Hacia adelante seguirá presionando sobre el déficit comercial bilateral la necesidad de importar soja para molienda. Sólo en los primeros cuatro meses del año se importaron 3 millones de toneladas de soja casi igual que en todo 2022 y se estima que entre mayo y diciembre se deberían importar otras 7 millones adicionales (2 veces por encima del promedio de los últimos 5 años) que provendrán principalmente de Brasil, Paragua y Bolivia. Abeceb dijo que “de no registrarse ese nivel de importaciones, la molienda caería un 37% en 2023”.

Aunque, advirtió, “con un BCRA sin reservas (en rigor habría finalizado mayo con reservas netas negativas por casi US$ 2.000 millones cuando al 31 de diciembre tenía un stock de US$ 7.700 millones), lo más probable es que el Gobierno busca apretar aún más el torniquete importador considerando que en el segundo semestre se viene el fin de la cosecha gruesa y del dólar soja 3”.

El torniquete adicional sobre las importaciones, razonan, luce ser cada vez más ineludible.

Fuente: El Economista