Dumont, CEO de Bayer: «Vamos a tener mucha volatilidad, hay que prepararse»

Dumont, CEO de Bayer: «Vamos a tener mucha volatilidad, hay que prepararse»

Cristophe Dumont, presidente y Ceo de la empresa para Argentina y el Cono Sur, habla sobre la fusión con Monsanto, la crisis económica y el futuro.

La pandemia cambió la vida cotidiana y generó grandes disrupciones para las empresas, tanto para las startups como para las tradicionales. El contexto barrió con todo lo conocido y obliga a repensar semana a semana los negocios. Bayer, una compañía centenaria y global lo vive en carne propia.

La firma que está en la Argentina desde 1905 tiene una misión y una visión muy claras, con un plan de trabajo para los próximos diez años y metas que la acercan más al preciado anhelo de la sustentabilidad. Sin embargo, lo que no estaba en carpeta, era la pandemia.

Christophe Dumont, Presiente y CEO de la compañía para Argentina y Cono Sur explica que el Covid-19 no frenó los planes de la empresa, sino que “nos enseñó cosas nuevas, como que podemos conectar y colaborar activamente de manera virtual». Algo que ya hacía una parte importante de los 2800 empleados que tiene la firma en el cono sur, pero que “aceleró” este aislamiento obligatorio. “En algunos casos puede mejorar incluso la productividad y evitar que la persona se traslade a una oficina o consultorio».

A fines de abril la compañía realizó su Asamblea General de accionistas y Dumont cuenta que asistió desde su casa en Argentina, utilizando su celular. “Bayer fue la primer empresa alemana en convocar a sus accionistas mediante videoconferencia”, dice complacido y explica que la resiliencia es una de las mayores virtudes de las compañías que logran adaptarse a los entornos cambiantes. En ese proceso está la firma y su líder local se pone a la cabeza e insiste “Hay que repensar el trabajo. Nuevo no significa mejorar, sino cambiar».

– Al dedicarse a dos actividades exceptuadas de la cuarentena, ¿cómo enfrentó Bayer la pandemia?

– La empresa tiene un lugar particular en esta pandemia. En ciertos países somos una empresa crítica para el sistema que necesita asegurar necesidades tan básicas para la humanidad como la alimentación y la salud. Fue muy dinámico pero nos dimos cuenta que para la empresa no fue una cuestión de suerte o de tener un privilegio sino que fue una cuestión de gran responsabilidad.

– ¿Qué pasó con la logística? Hubo muchos problemas al comienzo

– Nadie estaba preparado para esto. Hubo muchas críticas sobre las trabas al transporte, en especial entre provincias y municipios, pero creo que todo fue difícil y caótico, tanto para la autoridad como para las empresas y al final pudimos destrabar muchas cosas mostrando que se necesitaba cooperar entre las autoridades y las empresas exceptuadas y ahora eso funciona bien. En la empresa nos organizarnos a nivel de todas las plantas. Tenemos 6 en Argentina, tanto de semillas, de productos agroquímicos, biológicos y productos para el cuidado de la salud y también dos plantas en Chile que producen semillas de varios cultivos. Con el equipo pudimos pasar de la emergencia de un día para el otro a prepararnos para una semana y ahora estamos vislumbrando qué vamos a hacer en junio. Me gustaría también hacer planes a mediano plazo pero la situación es tan dinámica que tenemos que adaptarnos a esta nueva normalidad que creo no va a durar 10 años pero que si va a durar varios meses.

– ¿Cuántas personas trabajan en la firma?

– Tenemos aproximadamente 2800 empleados en Cono Sur, además de los trabajadores eventuales. De los empleados, casi la mitad trabajan en oficinas y en la red comercial o técnica hay 1300 empleados en las 8 plantas. La mayoría en Argentina. La planta de semillas de maíz de Rojas, la más grande de Bayer a nivel mundial de semillas de maíz, tiene 400 operarios con los que tuvimos que tomar especiales cuidados durante la etapa de cosecha entre marzo y abril.

– ¿Siguieron trabajando normalmente o cambiaron la dinámica?

– Tuvimos que cambiar porque la prioridad número 1 a nivel externo era asegurar la continuidad del suministro de alimentos y de medicamentos, pero nuestra prioridad era cuidar a nuestros empleados. Y eso nos hizo muy bien.

– ¿Cómo fue cerrar la cosecha en medio del aislamiento obligatorio?

– El pico de cosecha fue en abril y enfrentamos la cuarentena con muchas restricciones, en especial en materia de transporte y de personas. Creo que la crisis del COVID 19 tiene que evitar la circulación de personas pero no evitar la circulación de productos o activos financieros (flujos de caja – flujos de productos). Ese es el gran reto que tenemos. Cuando comenzamos con el comité de crisis en marzo me metí personalmente a encabezar el comité de producción porque pensé que sin producción todo lo que hacemos en Bayer ya no tiene sentido. El foco era la logistica de toda la gente que trabaja en planta, desde salir de su casa hasta volver, en asegurarle las mejores condiciones para no contaminarse y no contaminar a los demás. Si hay un problema de contaminación en una plata puede ser muy complicado. Hasta ahora no sufrimos ningún caso. Trabajamos para mantener un cuidado extremo de la gente, chequear la salud cuando llega y cuando se va. Y ese es el compromiso número 1 de la firma.

– A fin de año terminó el proceso de integración con Monsanto y llegó el coronavirus. ¿Pudieron cerrar bien esa integración?

– Cada vez que pienso que tuvimos suerte me digo que no fue suerte, fue un plan cumplido y que entregamos a tiempo. La única suerte que tuvimos es que el coronavirus nos agarró algunos dias después de Expoagro (5 días después comenzó la cuarentena). Dicho esto creo que fue muy bueno no postergar los planes y no fue fácil. En 2019 todos los equipos trabajaron mucho para estar a tiempo para marzo con la feria, eso nos permite estar 100 por ciento preparados para esta nueva campaña agrícola pero ahora estamos aprendiendo todos los días como entregar de manera más virtual y no presencial. Que eso no estaba previsto.

– ¿Cómo es el vínculo con el nuevo gobierno?

– Entendemos el rol que tenemos y mantenemos el compromiso y la responsabilidad. Cooperamos con el Ministerio de Salud, con la Asociación de Semilleros y CASAFE, la asociación de medicamentos y creo que hasta ahora hubo una buena comunicación y cooperación para juntos poder enfrentar la pandemia.

– ¿Cómo se distribuye el negocio de Bayer hoy en Argentina?

– El 85% del negocio es agro, y del resto es salud entre pharma (12%) y OTC que son los productos de venta libre.. A nivel global en el primer trimestre las ventas crecieron un 6% con fuerte crecimiento en Latinoamérica, y en el Cono Sur, especialmente en salud. Pero creo que es difícil extrapolarlo a todo el año por las compras preventivas que hizo la gente, en especial a finales de marzo. Nuestro CEO, Werner Baumann, confirmó a fines de abril que aún no se puede dar una perspectiva de negocios.

– Va cambiando el concepto de RSE de las empresas. ¿Qué hizo Bayer en este plano?

– Desde su nacimiento la empresa siempre ha puesto un foco importante en la RSE. Con esta pandemia quisimos enfocarnos en 3 ejes:

1) El cuidado de la salud de todos los colaboradores,

2) La continuidad del negocio

3) Reforzar los lazos con la comunidad a través de donaciones.

Pienso que una empresa como Bayer, exceptuada, debía ayudar si o sí. En Argentina se donaron 25 millones de pesos y decidimos ayudar a una ONG como la Cruz Roja con un monto bastante alto y una iniciativa entre varias entidades religiosas, sociales y empresas grandes y pequeñas que se llama Seamos Uno y cuyo objetivo es ayudar a 4 millones de personas vulnerables a tener comida y medicamentos. También estamos con donaciones en hospitales de zonas donde estamos operando como Pergamino, Rojas y Las Heras

– ¿Cómo enfocan la sustentabilidad?

– Es un compromiso. Desde 2020 estamos preparando los planes y trabajando. El objetivo es que en 2030, el área de sostenibilidad influirá en las decisiones de negocio y será evaluada con el mismo rigor que el área financiera. Se suscribieron los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y tenemos el compromiso de apoyar a 100 millones de pequeños agricultores para reducir la pobreza en comunidades rurales y adoptar acciones significativas para proteger el clima y el medioambiete, buscando alcanzar la neutralidad de carbono en sus operaciones. Particularmente tengo un foco para asegurar que en 2030 todos los sites de Bayer sean neutrales desde el punto de vista de consumo energético. Y para eso se necesita compensar emisiones -por ejemplo- con zonas verdes, reemplazar energía fósil con energía verde, ahí estamos bastante involucrados con esto también en Cono Sur y específicamente en Argentina,

– ¿Cuáles son los planes en el corto plazo?

– Quisiera darle a la gente un poco más de visión de futuro, para que se prepare tanto a nivel familiar como profesional. Pero escucho mucho a mi equipo y ellos que son argentinos y entienden muy bien la cultura, saben que conocer los planes para fines de mayo ya es algo importante.Creo que hay que tomar decisiones a tiempo y no lamentar decisiones apresuradas. La credibilidad de los líderes es sumamente importante y no lo quiero perder.

– Se dice que los argentinos nos adaptamos rápido a los cambios…

– Argentina está más acostumbrada a una volatilidad bastante importante tanto a nivel interno, externo, climático y esto creo que da una ventaja para gestionar esta crisis de la que tenemos mucho por aprender.

– ¿Cómo enfrentan este año tan volátil para la actividad agropecuaria?

– Vamos a tener mucha volatilidad, tal vez más que años anteriores, eso me dice que hay que prepararse. Año tras años estamos volcando 600 millones de dólares en innovación, desarrollo, producción de semillas y de protección de cultivos y también estamos financiando por igual monto de 600 millones de dólares a los productores. Eso les permite tener acceso a la mejor tecnología del mercado y financiar en un ámbito muy impredecible de alta incertidumbre y desafíos.

– Para atenuar la volatilidad, ¿ayudan las herramientas digitales en la producción?

– A mediados e 2019 lanzamos la plataforma FIELDVIEW de Climate Corp donde el productor puede mirar desde su casa y a través de un I PAD lo que está pasando en el campo y puede tomar decisiones. Esta plataforma con la que superamos el millón de hectáreas bajo análisis a nivel local, no es más ni menos que una herramienta para ayudar a todos los productores grandes y pequeños, en cualquier país del mundo, a producir de manera mas eficiente (reducir la incertidumbre) y lograr más productividad pero sin dañar el campo (sustentabilidad).

– Una conclusión de lo que vendrá….

– Con Bayer llegamos a la Argentina en 1911, nos juntamos ahora con otra gran empresa Monsanto que llegó creo en 1956. Los últimos años a raíz de la integración el equipo mostró mucha resiliencia y esperaba que en este 2020 pudiéramos descansar. Pero bueno, la pandemia nos trajo mucha incertidumbre, volatilidad e incertidumbre, pero todo lo que se hizo en años anteriores nos va ayudar porque estamos preparados. El equipo está unido y eso ayuda en el trabajo diario, en la confianza para trabajar de manera virtual que no es fácil. Pase lo que pase creemos que podremos aportar mucho a la agricultura argentina y al sector de la salud.

Fuente: Perfíl