Domecq, de Invecq: “Tendremos cepo para largo en esta economía”

Domecq, de Invecq: “Tendremos cepo para largo en esta economía”

A la espera de definiciones respecto al plan de gobierno de Alberto Fernández, los inversores se mantienen cautelosos y con incertidumbre.  Para dilucidar el panorama esperado por la City y las inversiones más convenientes para este momento, BANK MAGAZINE habló con Esteban Domecq, presidente de Invecq.

Por Mariano Jaimovich

“Tendremos cepo para largo en esta economía” dice Esteban Domecq, Presidente de Invecq. Foto EXPOEFI 2019.

-¿Cómo lee la situación actual para hacer inversiones?
-La situación actual es aún de transición política. Si bien ya se definió el futuro Presidente de Argentina, aún estamos a la espera de qué es lo que querrá hacer en materia económica, el detalle de las medidas. En esta transición, la actividad económica arrastra inercialmente la fase recesiva en este cuarto trimestre del 2019, mientras que el cepo cambiario contiene los desequilibrios en el frente monetario y cambiario. La situación sigue siendo de mucha fragilidad, con desequilibrios macro latentes, con lo cual será clave observar los primeros pasos del nuevo gobierno. Es un escenario de «wait and see» en materia de inversiones.


-¿Qué acciones y bonos están recomendando para inversores particulares?
Las recomendaciones de inversión depende mucho de los objetivos y del perfil de cada inversor. Con la confianza por el piso y con un déficit fiscal que siga latente, estamos ante una inminente reestructuración de la deuda pública. Sólo resta saber si será con default mediante o no. Con este marco no somos muy optimistas respecto a la forma en que se renegociará la deuda en términos de años de gracia, extensión de plazos y quitas de capital e intereses. Creemos que aún hay margen para perder, con lo cual no es momento de entrar en renta fija. Para quienes tengan tiempo y mayor tolerancia al riesgo, las acciones pueden ser una mejor inversión, sobre todo las de empresas ligadas a consumo masivo, construcción y productos primarios. Pero sí o sí hay que tener tiempo para realizar este tipo de inversiones.


-¿En qué están invirtiendo la liquidez que poseen?
-La prioridad hoy es tener cobertura cambiaria y máxima liquidez. Esto se puede lograr a través de posturas dolarizadas o a través de instrumentos en pesos indexados por CER o por UVA. Hay algunas alternativas interesantes en fondos comunes de inversión que cumplen estas condiciones, las cuales creo que son clave para transitar los primeros días del nuevo gobierno.

-¿Qué estimaciones tienen respecto al dólar?
-Será clave conocer cuál será el nuevo programa monetario y el correspondiente régimen cambiario que aplique el gobierno de Alberto Fernández. Consideramos descartada una política de shock inicial, con lo cual tendremos cepo para largo en esta economía. En este escenario, probablemente usen el tipo de cambio como ancla nominal, con lo cual deberemos ver un tipo de cambio minorista en la zona de $66/$68 hacia fin de año. A partir de entonces, salvo que tengamos algún shock en el frente externo, veremos un dólar que corra un poco más lento que la inflación en los primeros meses del 2020. No obstante, si bien faltan pocos días para la llegada del nuevo gobierno, la incertidumbre es muy alta, y el abanico de posibilidades es muy amplio, con lo cual habrá que ver qué es lo que hacen.

-¿Cuál es el panorama en cuanto a las tasas de interés?
-La respuesta está en línea con lo anterior, habrá que ver el programa. Algunos comentarios del equipo económico permiten anticipar que iremos hacia un escenario de tasas de interés nominales más bajas, y tal vez negativas en términos reales. Esto implica que tomarán mucho riesgo en términos de estabilidad monetaria, donde la demanda de dinero continua muy baja. El riesgo está que se empiece a acelerar la inflación y ajuste con mayor brecha cambiara.

-¿Qué expectativas para el mundo inversor tiene con respecto al nuevo Gobierno?
-Creo que los reclamos están en sintonía con corregir los desequilibrios fiscales y externos, asegurar la estabilidad macroeconómica y respetar las reglas de juego. De alguna manera, esto implicaría continuar el proceso de normalización macroeconómico que inició Cambiemos, y lograr que la economía pueda encausarse en una fase de crecimiento sostenido, cosa que el gobierno saliente no logró hacer. En la medida que se cumplan estos requisitos y se reestructure de manera amigable la deuda, podremos ver que la confianza sobre Argentina y el nuevo gobierno empezará a mejorar, y lentamente se recuperarán los precios de los activos argentinos.-