Cómo pasar de estar en una familia humilde a gestionar mil millones

Cómo pasar de estar en una familia humilde a gestionar mil millones
«Un día al alcanzar el top 1 de ranking, recibí una llamada de un agente de bolsa, indicándome que el juego era un simulador bursátil, y que había ganado el concurso del inversor del año”, tenía 14 años.

Cuando hablamos de emprender, cada historia es un mundo. Hay emprendedores que no ven su proyecto emprendible y hay otros que se esfuerzan por convertir lo que más saben en su proyecto de vida, Sergio Morales, es uno de ellos.

Autor del libro reciéntemente lanzado “Análisis Fundamental: Estrategias para invertir en el mercado argentino” junto a Mariano Pantanetti; nació en La Matanza y es la primera generación universitaria en su familia. Convertido en consultor financiero, gestiona más de mil millones de pesos. En una entrevista exclusiva para BANK Magazine comparte su experiencia:

¿Cómo y cuándo comenzaste a invertir? 

Cuando tenía 14 años me mudé con mi hermano desde La Matanza a la Ciudad de Buenos Aires, porque él había ingresado a la carrera de medicina en la UBA. Para pagar los costos de alquiler, comenzó a trabajar en un cyber locutorio por la tarde, y luego de salir del colegio lo acompañaba. En ese lugar un chico me habló de un juego de inversiones que llamó mi atención y que más tarde comencé a jugar. Un día al alcanzar el top 1 de ranking en un torneo, recibí una llamada de un agente de bolsa, indicándome que el juego era un simulador bursátil, y que había ganado el concurso del “inversor del año”, el cual consistía en una pequeña suma de dinero para invertir en la vida real. Fue así cómo comencé a invertir, y aquel oficial de cuentas que me llamó, hoy es Gerente de Inversiones de dicha sociedad de bolsa y actual presidente del CFA Society Argentina, Alejandro Bianchi, a quien le debo mis comienzos en la Bolsa.

¿Cómo comenzaste tu trayectoria profesional? 

Pienso que comencé como consultor financiero  porque, naturalmente, lo llevo en mi ADN. Todos sabemos que la inversión financiera es una herramienta necesaria para que las personas puedan preservar el valor de los ahorros y mejorar su calidad de vida. Sin embargo, este tipo de servicios no eran accesibles en su momento para mi familia y aún no lo sigue siendo para gran parte de los argentinos. Esto me condujo a formarme como politólogo, en primer lugar, para entender de políticas gubernamentales. Y, en segundo lugar, a reforzar mis conocimientos con una Maestría en Finanzas en la Universidad de Buenos Aires, cuando decidí definitivamente volcarme a la consultoría financiera.  

¿Con qué apoyo personal y profesional contaste? 

A nivel profesional, fue fundamental contar con la confianza y el apoyo del vicepresidente de Futuro Bursátil, Santiago Llull, y por supuesto de Alejandro Bianchi, entre otros colegas del mercado, algo que siempre tendré presente. A nivel personal, el apoyo de mis padres y de mi hermano, ha sido lo más valioso para mí. 

¿Cuáles son tus emprendimientos? 

Soy co-fundador y presidente del Centro Latinoamericano de Inversiones (CELAI), organización civil sin fines de lucro dedicada a brindar asesoramiento y asistencia técnico-financiera a emprendedores y pymes de la región, en general, y de Argentina en particular. Además, CEO de Morales Valores, sociedad de inversión que cuenta con un equipo de doce profesionales con reconocida trayectoria en el mercado de capitales, que de forma directa e indirecta, por medio de alianzas estratégicas con entidades financieras del más alto nivel, gestionamos más de mil millones de pesos. 

¿Cómo y por qué motivo creaste CELAI? 

Luego de la apertura de capitales de argentina a fines del 2015, con un grupo de amigos del ámbito de economía y finanzas observamos la necesidad del país de contar con organizaciones intermedias en materia de fomento de inversiones. En ese momento, decidimos formar una asociación civil de vinculación público-privada para el desarrollo del mercado de capitales argentino pero con proyección regional, ya que consideramos que las economías latinoamericanas tienen, en menor o mayor medida, una amplia necesidad de financiamiento con respecto a los países desarrollados. 

¿Qué es lo que más te costó al arrancar tu rol empresarial? 

Lo más difícil al arrancar en el mundo bursátil ha sido ganar la confianza del mercado. El reto ahora es mantenerla y asegurar el éxito de nuestros clientes que, en definitiva, también es nuestro éxito. Por este motivo, en el día a día centramos todas nuestras energías en los proyectos de inversión de las pymes, emprendedores e inversores para los que trabajamos y que han confiado en nosotros. 

¿Qué fracasos tuviste y qué aprendiste de ellos? 

Haber invertido desde tan prematuramente trajo aparejado muchos errores y fracasos de inversión, tales como la falta de diversificación en la cartera o una subestimación del riesgo. Con el tiempo no solamente pude forjar un criterio y un estilo propio de inversión, sino también el conocimiento y la templanza para comprender, que al igual que las inversiones, un árbol no puede dar frutos antes de tiempo. 

Por último, ¿una recomendación para el que recién comienza a invertir? 

Así como los antiguos alquimistas buscaban una sustancia llamada “piedra filosofal” que transforme el plomo en oro. En este sentido, para quien está dando sus primeros pasos y busca aprender técnicas financieras, es posible que, rápidamente y sin darse cuenta, termine preso de esta peligrosa fantasía. En este sentido, el éxito de una inversión no depende de encontrar un método infalible, sino del plazo de inversión y el perfil de riesgo de cada uno, bajo un criterio que no puede ser siempre vacilante, confuso y contradictorio, sino que recomendamos ser fiel a una estrategia constante, rigurosa y permanente, para lograr los resultados esperados.