Comida asiática en el corazón de Bs.As.

Buenos Aires sucumbió ante los lejanos sabores de Corea, Filipinas,Tailandia, India y Malasia. Los palermitanos Sudestada y Green Bamboo, Lothus Neo Thai en el Barrio Chino y la fusión india- mediterránea de Bengal, en Retiro fueron los pioneros en recrear las recetas asiáticas. Años después, las propuestas de comida made in Oriente, acá llamada «étnica», se multiplicaron y la tendencia sigue en alza.

Sunae Asian Cantina

Christina Sunae es una referente de la cocina asiática desde 2008, cuando empezó a cocinar a puertas cerradas en una casa de Villa Urquiza las recetas de sus ancestros (madre biológica coreana, madre de crianza filipina, aunque nació y se formó en Estados Unidos antes de llegar a la Argentina). Sólo llegaban los entendidos y amantes de la buena mesa.
Con su marido, Franco Ferratelli, decidieron recuperar la casa familiar y dar el salto al público masivo y a la calle. Así surgió en 2016 esta cantina moderna en Palermo Hollywood y se sumaron nuevos adeptos, sin perder la mística del origen.
En un salón largo, con impecable cocina a la vista, fondo de empapelado tropical y plátanos reales con ramas que cuelgan entre las mesas, el menú reúne un mix de platos del Sudeste Asiático (Tailandia, Filipinas, Vietnam, Indonesia y Malasia) que logran un delicado equilibrio de sabores y texturas (dulce, amargo, crocante, gelatinoso). Además del ambiente, cambió el menú fijo de pasos por una carta más amplia y variada. Las claves son el respeto por las recetas tradicionales (no extrapolaciones adaptadas al paladar local) y el uso de ingredientes frescos, como pescados, hierbas y especias exóticas presentados con flores, colores y un toque bastante femenino.
La casa tiene sus reglas: se puede comer con la mano y vale hacer ruiditos con la boca, como cuando se toma el caldo

Captain Cook

El primer contacto de Marta Ramírez con la cocina fue a los 19, cuando vivió con una familia camboyana en Estados Unidos. Después vinieron varios viajes y, finalmente, el restaurante propio. Hace más de diez años abrió en Marina del Norte, San Fernando, y hace cuatro se mudó a Martínez.
En una casa de dos plantas, patio y galería, ofrece un menú que define como «panasiático». Cada plato tiene al costado un indicador de la intensidad del picante. Un buen comienzo pueden ser los khun kara, unos langostinos caramelizados en salsa thai con bastones de mandioca fritos. La novedad es un plato malayo llamado Daging Goreng Berdanas: bife salteado con ananá, cebolla de verdeo y morrón, con arroz estilo biryani y maní.
 

El Quinto

En el límite del Chinatown, es una de las propuestas más cancheras. No sólo por su decoración contemporánea y minimalista sino por su puesta en escena: cocina abierta, mesas compartidas y una barra que despacha cócteles y tapas inspiradas en Asia (imperdible el bao, pan chino al vapor con cerdo braseado, cebolla morada, pepino encurtido y cilantro, con salsa hoisin). Comandado por la dupla de Quique Yafuso -propietario, también, de Haiku- y Gonzalo Sacot (ex Sucre), ofrece platos de distintos países asiáticos. Recorrer la carta es un viaje con escalas en Indonesia, Japón, Corea y Tailandia. El tradicional pad thai se prepara con fideos de batata salteados con verduras, camarones, langostinos y calamares, con salsa de tamarindo y ostras.

Fuente: La Nación