China usa sus reservas para contener el precio del cobre

Las tensiones inflacionistas se han convertido en una preocupación global. El último ejemplo se ha visto en China, que ha vuelto a utilizar sus reservas de materias primas para contener el precio de algunos metales en su mercado interior, en un momento en el que algunos se encuentran en máximos.

En concreto, ha subastado 30.000 toneladas de cobre, 70.000 toneladas de aluminio y 50.000 toneladas de zinc. Es la tercera vez que el gigante asiático recurre a sus provisiones desde el principio del verano (en las dos anteriores subastó 270.000 toneladas), en un intento de frenar la escalada de metales como el aluminio, que esta semana han alcanzado su precio máximo de los últimos trece años en la bolsa de futuros de Shanghai.

Preocupación en el régimen

Esta utilización de sus reservas estratégicas de materias primas se ha convertido en un motivo de preocupación para las autoridades del régimen comunista, lo que ha llevado al presidente chino, Xi Jinping, a pedir una mejor administración de las mismas, según recoge Reuters, aunque no se descarta que se sigan usando para contener los costes de las empresas chinas. Hay que tener en cuenta que la potencia asiática lleva subastadas en tan solo dos meses 420.000 toneladas de cobre.

La Administración Nacional de Alimentos y Reservas Estratégicas ha advertido de que vigilará con «atención» las variaciones del precio de las materias primas.

Esta preocupación por el precio de las materias primas se observa también en el petróleo. La última reunión del grupo de países de la OPEP, que incluye a Rusia, celebrada ayer, terminó con pocas novedades sobre lo previsto, que es el incremento paulatino de la producción en 400.000 barriles diarios, para ir recuperando los niveles anteriores al Covid. Esta decisión llevó el Brent a los 70,89 dólares.

Aunque la variante delta del Covid había hecho temer que la demanda se ralentizase en la primera economía mundial, los países productores han mantenido su intención de cerrar la brecha entre oferta y demanda. El cártel espera, de hecho, que en 2022 se produzca una sobreoferta en el mercado.

Fuente: El Economista Es