CAME reclama una rebaja impositiva

(EL Economista) – Más de 100 entidades de pequeños y medianos productores agroindustriales plantearon sus reclamos al ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, durante el Plenario Nacional de Economías Regionales de CAME. Plantean la existencia de una alta carga tributaria y la escasa participación dentro de los precios finales fueron algunos de los principales puntos sobre los que se hizo hincapié.

Durante el encuentro, el titular de Economías Regionales de CAME, Raúl Robin, dijo: “Dentro de las cadenas de valor hay eslabones que han concentrado poder y lo utilizan para fijar precios e incrementar sus márgenes de ganancia, en detrimento del pequeño y mediano productor. Si queremos ser el supermercado del mundo, debemos trabajar en mejorar la rentabilidad y competitividad del actor más vulnerable de la cadena: el productor”.
En la misma sintonía, el presidente de CAME, Fabián Tarrío, afirmó: “De no acelerarse la discusión y dados los ciclos productivos, los alivios podrían llegar demasiado tarde al agro. En el sector todavía el poncho no aparece”.
En ese sentido, desde CAME comunicaron que uno de los puntos principales que persigue el sector es incrementar la participación del productor en el precio final de los productos agropecuarios. “Según el Idice de Precios en Origen y Destino (IPOD) que elabora CAME en mayo apenas promedió un 22 %”, señala el informe.
Otro de los puntos clave tocados en la reunión, tal como remarcaron desde CAME, fue el pedido de realizar una reforma impositiva integral. Al respecto el comunicado brindó unos datos interesantes: “De cada $ 100 que los consumidores pagan por sus alimentos agropecuarios, $ 40 corresponden a tributos contenidos en el precio de venta final, de los cuales $ 12 corresponden al IVA, $ 10 a Seguridad Social, $ 8 a Ingresos Brutos, $ 5 al Impuesto a las Ganancias, casi $ 3 al Impuesto al Cheque y $ 2 al Impuesto Municipal”.
El encuentro contó con la participación de Buryaile, que destacó que “los problemas de las economías regionales tienen múltiples factores como la distancia a puerto, capacidad de negociación, problemas fitosanitarios, presión fiscal, etcétera”. Y prometió cumplir otro de los puntos señalados por CAME como un reclamo clave: realizar un censo agropecuario.
Los otros dos puntos clave tratados en el Plenario fueron reglamentar el artículo 11 de la Ley Pyme, para poder acceder a los beneficios que otorga a las actividades identificadas como pertenecientes a una economía regional, y reducir las cargas patronales para que el empresario pueda mantener y generar nuevos puestos de trabajo formales.