BCE: Control de inflación solo con ajuste monetario sería muy costoso par al sociedad

BCE: Control de inflación solo con ajuste monetario sería muy costoso par al sociedad

Hacer frente a la inflación récord de la zona euro solo a través de la política monetaria presenta el riesgo de imponer costos a la sociedad, dijo un alto funcionario del Banco Central Europeo, instando a los Gobiernos a compartir parte de la carga protegiendo a los hogares de los altísimos precios de la energía.

Gran parte del aumento de la inflación, que ahora es más de tres veces el objetivo del 2% del BCE, se debe a factores geopolíticos más allá de la influencia de los banqueros centrales, dijo el miércoles el miembro de la Junta Ejecutiva Fabio Panetta en un discurso en Cassino, Italia.

Pidió una “estrategia de política fiscal y monetaria coherente” como una forma menos dañina de controlar los precios, y sugirió que las reducciones en los impuestos indirectos o mayores transferencias a los más vulnerables mitigarían los efectos del aumento de la energía.

La presidenta del BCE, Christine Lagarde, también respalda la ayuda específica de los Gobiernos, que ya han gastado decenas de miles de millones de euros para aliviar la contracción del costo de vida.

“Pedir a la política monetaria por sí sola que reduzca la inflación a corto plazo mientras las expectativas de inflación permanecen bien ancladas sería extremadamente costoso”, dijo Panetta. “Un endurecimiento de la política monetaria no afectaría directamente los precios de la energía y los alimentos importados, que están impulsados por factores globales y ahora por la guerra. En cambio, tendríamos que suprimir masivamente la demanda interna para reducir la inflación”.

Precios

Hablando en una conferencia en Grecia, el economista jefe del BCE, Philip Lane, hizo eco de las apreciaciones de Panetta sobre la naturaleza del choque de precios.

“Hay una diferencia entre un episodio impulsado por el entorno de inflación interna y un episodio en el que gran parte de la inflación es esencialmente importada”, dijo, y reiteró que los responsables de las políticas monetarias deberían estar listos para moverse en cualquier dirección, dependiendo de cómo se desarrolle la guerra en Ucrania.

Los comentarios destacan el desafío de frenar la inflación sin descarrilar el repunte de la pandemia en Europa, especialmente después de la invasión de Rusia a Ucrania. También subrayan cómo el telón de fondo difiere del de Estados Unidos, que está listo para aumentar las tasas de interés frente a presiones inflacionarias más rápidas y mucho más amplias que son más impulsadas internamente.

Estímulos monetarios

Si bien el BCE ha acelerado su retiro de los estímulos monetarios, sigue habiendo desacuerdo sobre cuándo comenzar a subir las tasas. Mientras la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra están haciendo precisamente eso, los mercados están apostando a alzas de un cuarto de punto por parte del BCE en septiembre, diciembre, enero y marzo.

Panetta dijo que el BCE no dudará en actuar si la crisis de oferta lleva a que las expectativas de inflación se salgan de control, o si los salarios suben excesivamente. Sin embargo, sonaba escéptico de que tal escenario se materializaría.

“Hoy no vemos evidencia de tales efectos secundarios”, dijo Panetta. “Y es posible que no se materialicen dada la credibilidad de nuestro compromiso de preservar la estabilidad de precios, que ayuda a anclar las expectativas de inflación, y el grado excepcional de incertidumbre que enfrentamos hoy, que puede inducir a los trabajadores a priorizar la seguridad laboral sobre los aumentos salariales”.

Fuente: Bloomberg