Alberto Fernández repuso un punto de tensión política local e internacional: gesto a Maduro y dura reacción opositora
De forma sorpresiva, mientras la atención política estaba en China y en el viaje de Sergio Massa y Máximo Kirchner, el presidente Alberto Fernández mantuvo en Brasil una reunión bilateral con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y reclamó el levantamiento de las sanciones internacionales contra Caracas. El encuentro despertó una fuerte reacción en la oposición y reflotó un punto de tensión que estaba dormido hace meses.
«La salida política a la situación en la República Bolivariana de Venezuela no debe tener presiones ni condicionamientos externos para garantizar la plena vigencia de la democracia y el respeto de los Derechos Humanos», dijo Alberto Fernández.
El cónclave se produjo en el marco del Encuentro de Presidentes de los países de América del Sur que se lleva a cabo este martes en el Palacio Itamaraty de Brasilia «con el objetivo de generar consensos y reforzar los mecanismos de integración latinoamericana», destacó un comunicado de Presidencia de la Nación, sobre la cumbre que organizó Lula da Silva.
Durante el encuentro, del que también participaron los cancilleres Santiago Cafiero e Yván Gil Pinto y el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, Fernández pidió a Maduro que Venezuela vuelva a estar representada en foros y mecanismos internacionales, remarcando principalmente a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Argentina reiteró la necesidad de que se quiten las sanciones impuestas por otros países, tal como lo ha hecho en diferentes oportunidades como la IX Cumbre de las Américas, en junio de 2022 en Los Ángeles, Estados Unidos; la VII Cumbre de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en enero pasado en Buenos Aires, y la Conferencia Internacional realizada en Colombia en abril último.
Luego de la cumbre, los principales precandidatos presidenciales de Juntos por el Cambio, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich salieron rápidamente a cruzar al Presidente.
Primero se expresó en Twitter el jefe de Gobierno porteño: «El encuentro entre Alberto Fernández y el dictador Nicolás Maduro me avergüenza ante los miles y miles de venezolanos que eligieron vivir en nuestro país como refugio frente a la dictadura venezolana», expresó. «Nuestra causa es la de la democracia y el respeto por los DDHH. Mi solidaridad con todas las víctimas de las dictaduras en América Latina», agregó.
Se pronunció en el mismo sentido Bullrich, su contrincante en la interna del PRO y de JxC, con quien se medirá en las PASO de agosto para definir cuál de los dos será el candidato del espacio. «Siempre del lado equivocado de la historia. Conmigo esto se acaba«, prometió la exministra de Seguridad de Mauricio Macri en Twitter.
También el hoy presidenciable de la UCR y presidente del partido radical, Gerardo Morales, se sumó a las críticas. «Alberto Fernández está en un plato volador todavía circundando por la galaxia, y Cristina Kirchner se cree que recién bajó de uno, porque siendo ella la responsable del armado del Frente de Todos, se hace como que no tiene responsabilidad. Esta reunión es una burla a los procesos democráticos, a los derechos humanos y a la libertad de los pueblos, que es exactamente lo contrario de lo que sostuvo Alberto Fernández para justificar el encuentro», sostuvo el gobernador jujeño.
Mientras el Presidente desarrollaba su agenda en Brasil, luego de dejar la máxima responsabilidad de gobierno a la vicepresidenta Cristina Kirchner de forma transitoria, el ministro de Economía, Sergio Massa, encabezaba una comitiva oficial en China con referentes importantes de la coalición oficialista como el líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, la titular de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, el vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos, entre otros. El Frente de Todos debe definir aún si decide sus candidatura en una PASO, o la Vicepresidenta se impondrá y resolverá una fórmula única.
