«Ahora no van a poder decir que no tenemos plan»

«Ahora no van a poder decir que no tenemos plan»

El Presidente dijo que lo enviará al Congreso a principios del mes próximo; en la Casa Rosada dicen que será «plurianual»; apoyo a Guzmán

En una jornada de balance y resignación por la amplia derrota a nivel nacional a manos de Juntos por el Cambio, en la Casa Rosada solo ofrecían ayer líneas generales del plan que el presidente Alberto Fernández enviará al Congreso a principios del mes próximo.

El domingo, tras conocerse los primeros resultados electorales, Fernández anunció en un discurso grabado que presentaría una propuesta a la oposición.

Pero ayer no existían precisiones.

Una alta fuente del área económica explicó que sería «una ley en la línea del presupuesto que se envía todos los años al Congreso, pero con la mirada en el largo plazo», con énfasis en áreas sensibles, como déficit fiscal, inversión y gasto público. A eso se le sumarían distintas iniciativas ideadas por el Consejo Económico y Social, que encabeza el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, vinculadas a la generación de empleo (aún no presentada), electromovilidad y la política agroindustrial, según otra alta fuente oficial. «El Consejo está subestimado, pero allí se impusieron los sensatos», comentó un funcionario al tanto de los avances del foro.

El domingo, en medio del vértigo de una tarde con malas noticias y rodeado por un reducido núcleo de colaboradores, el presidente Alberto Fernández decidió verbalizar su respaldo a Martín Guzmán, el ministro de Economía que encabeza la negociación con el FMI, cuestionada por el cristinismo.

«Ahora no van a poder decir que no tenemos plan»

Afirmaron a la nación con tono desafiante muy cerca del Presidente, con la mira puesta tanto en las exigencias del FMI y la oposición como en las renovadas críticas que, antes de las legislativas, se escuchaban contra el ministro. En defensa del anuncio presidencial, distintos funcionarios remarcaban que la tranquilidad de ayer en el mercado cambiario se relacionaba con ese respaldo a Guzmán y la «idea de un plan a futuro» esbozada por el primer mandatario.

En la Jefatura de Gabinete, que encabeza Juan Manzur, agregaron que él será uno de los encargados de aglutinar los respaldos al proyecto, no solo de los gobernadores y dirigentes aliados, sino también de los opositores. «Con Guzmán tenemos una agenda en común», plantearon cerca de Manzur.

¿Hay chances de que la oposición dé el visto bueno en el corto plazo? Cerca del jefe de Gabinete dicen ser optimistas. Deslizan que el «buen vínculo» de Manzur con Horacio Rodríguez Larreta podría «ayudar» a facilitar el diálogo. En busca de señales, en la Casa Rosada vieron con agrado las declaraciones del radical Facundo Manes, quien se mostró en favor de «discutir» el futuro proyecto.

Diferencian a Rodríguez Larreta y Manes de «los (Mauricio) Macri y (Patricia) Bullrich, que siempre van a decir que no a todo». Y se jactaban de que este plan es diferente de la iniciativa de endeudamiento que «Macri decidió sin pasar por el Congreso».

Desde la oposición los distintos actores cumplen con el pacto de esperar «que muevan las blancas», como definió un experimentado dirigente radical, antes de evaluar un eventual apoyo al «plan plurianual».

«En principio, veremos qué opinan Cristina y quienes la rodean», agregaron.

Los mismos funcionarios reconocían, fuera de micrófono, que el lanzamiento verbal del plan tuvo mucho que ver con dar una respuesta rápida y algo improvisada a lo que dijeron las urnas. «De política mucho no podíamos hablar, los resultados no fueron buenos, entonces se decidió abordar un tema sensible, que es la economía y el acuerdo con el FMI, que es algo que venimos trabajando», coincidieron desde dos despachos oficiales.

Mientras tanto, desde el Gobierno combinaban la defensa de la estrategia oficial en favor de Guzmán con críticas al cristinismo.

«No pueden decir nada. Perdieron en provincia de Buenos Aires, el quorum del Senado y hasta en Santa Cruz», razonaban por lo bajo desde el albertismo, en referencia a los seguidores de Cristina Kirchner.

Alrededor del Presidente se muestran convencidos de la «necesidad de seguir juntos y no hacer locuras» en los largos 25 meses que le esperan de gestión, con desafíos políticos y económicos potenciados por el traspié electoral.

«Claro que lo respaldamos a Guzmán», afirman cerca del Presidente

El plan toma aspectos del presupuesto, pero «más a largo plazo»

El Presidente quiere incorporar al megaproyecto iniciativas del Consejo Económico y Social

Fuente: La Nación