Agosto sigue siendo un suplicio para los inversores

Agosto sigue siendo un suplicio para los inversores

Argentina y el deterioro económico en Europa, además de signos de agotamiento de EE.UU. anulan la tregua en la guerra comercial de Estados Unidos y China.

El temor a una recesión mundial hizo caer este miércoles todos los mercados bursátiles, arrastrados por miedo al impacto de la guerra comercial, la publicación de indicadores económicos inquietantes en China y Alemania, y las señales de alarma que llegaron desde el mercado obligatorio de Estados Unidos,

Aparte de Argentina

Además del derrumbe del peso y del estancamiento de la economía europea, preocupa la inversión de la curva de tipos en EEUU (tasas a corto plazo más altas que a largo) y la inesperada subida de la inflación. También se suman a la lista la devaluación del yuan, la guerra comercial -que seguramente volverá con novedades después de la tregua de esta semana-, la incertidumbre política en Italia y España, el eterno Brexit, las tasas negativas del BCE o el hecho de que muchos operadores tomaron ganancias para preservarse del primer semestre y no están en absoluto dispuestos a volver a entrar hasta fin de año.

El desplome de Argentina; en tanto Alemania, Italia y Gran Bretaña se dirigen hacia una recesión, malos datos de la curva de bonos de EE.UU. Foto: Bolsa de Francia

La economía de Alemania, primera potencia industrial europea, se contrajo 0,1% en el segundo trimestre, lo que provocó una disminución del crecimiento de la eurozona a 0,2%, dos veces inferior al del primer trimestre. Orientada hacia la exportación, Alemania se ve afectada por la degradación del comercio mundial, fruto de las tensiones entre Pekín y Washington.

En Estados Unidos, los precios a la importación registraron un alza inesperada de 0,2% en julio, sin poner en tela de juicio -sin embargo- la tendencia de fondo que sigue sugiriendo una moderación de las presiones inflacionistas importadas.

Desplomes generalizados

La totalidad de los mercados bursátiles mundiales acusó el efecto del temor a una ralentización del crecimiento. El índice mundial MSCI retrocedió 1,74% y el de los mercados emergentes, 0,52%. Esa tendencia, de confirmarse, afectará negativamente aún más a la economía argentina, en plena turbulencia poselectoral.

En ese agitado contexto, las bolsas europeas terminaron ayer en neto descenso. En París, el CAC 40 perdió 2,08%; el DAX alemán cayó 2,19%, y el FTSE británico, 1,42%.

Wall Street siguió la misma tendencia. En lo que fue una de los peores jornadas del año, los índices de la principal Bolsa de Estados Unidos cayeron 3,05% (Dow Jones) y 3,04% (Nasdaq).

Luz al final del túnel de agosto

El apoyo al mercado del Gobierno estadounidense y de la Reserva Federal, la enorme cantidad de dinero que se perdió la subida de principios de año y que estaba esperando una oportunidad para volver a entrar (oportunidad que claramente tiene ahora) o la falta de alternativas a la bolsa cuando cada vez hay más bonos con rentabilidad negativa; se convierten el puntos positivos para pensar el devenir de los mercados en el corto plazo.

Con información de Bolsamanía y La Nación